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Se jubilaron dos excelentes docentes de sus cargos administrativos.
Emotivas despedidas en la Escuela Nº 1.
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Se trata de dos hermanas, Liliana y Sonia Mariño, y ambas trabajan juntas en el mismo edificio. Una de ellas, Liliana, dejó el cargo de Secretaria de la Escuela Secundaria Nº 1 que tomó en el 2006, cerrando 34 años de trayectoria docente.
Por su parte, Sonia se jubiló de su cargo de Prosecretaria de la Primaria Nº 1, luego de 8 años de antigüedad, mientras continuará cumpliendo la labor de docente a cargo de grado en el la Escuela Nº 1.
Para ambas apreciadas docentes significa ir poniendo fin a muchos años de trabajo en el mismo establecimiento educativo.
La despedida se llevó a cabo el último día de marzo, en forma íntima, casi familiar, alejada del protocolo pero con toda la calidez del afecto logrado a lo largo de una tarea comprometida y responsable.
Pablo Schetizner, al despedir a Liliana Mariño, dijo que “tenía puesta la camiseta de la Escuela Secundaria Nº 1 y eso es mucho decir en estos tiempos”.
Le agradeció el apoyo permanente y la dedicación, que permitió que mientras la Secretaria se ocupaba de todas las cuestiones administrativas, de papelería de la escuela, le dejó espacio para que él pudiera llevar adelante su función como Director.
El acto de estas dos queridas Secretaria y Prosecretaria multiplicó las cartitas y los carteles de parte de los alumnos, que se llevan como recuerdo y como cosecha por el cariño sembrado en todos sus años de labor.
Las ciclos se van cumpliendo, pero queda latente el trabajo comprometido al servicio de la institución educativa, como así también la riqueza personal de la experiencia y el invalorable cariño de los alumnos; posiblemente, en la intimidad de la despedida, llevaba implícitas todas esas sensaciones para dos profesionales de la educación, que afrontaron todos los desafíos, marchas y contramarchas del sistema con toda dignidad.