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“La siembra es una elección, pero la cosecha es una obligación”.
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La Unidad Académica Dr. Julio César Lovecchio volvió a vestirse de emoción en el día de ayer, para despedir a una de sus más querida e histórica docente, a cargo del área de Educación Física.
A media mañana se dieron cita ex profesores, docentes, alumnos, directivos de la institución, cuerpo de “profes” colegas, para despedir de la actividad a quien fue durante más de 40 años profesora de Educación Física, Norma Vitali.
Entre las palabras de despedida que le prodigaron, entre otras cosas, se dijeron que “la siembra es una elección, pero la cosecha es una obligación, en relación directa con lo que se ha sembrado. Por eso estás ahora cosechando tanto cariño de quienes fueron tus compañeros, colegas y sobre todo de tus alumnos”, expresión que le correspondió a la profesora Marisel Álvarez.
Por su parte, Marifi Berraondo de Figueroa, quien integra el Centro de Ex alumnos del Colegio Nacional, junto a Norma Vitali, empezó sus palabras de despedida diciendo que “en esta vida algunos son estrellas y otros son cometa. Hay quienes dejan una profunda huella y su luz nunca se acaba, mientras otros pasan sin ser notados. Hay quienes eligen solo existir y otros viven a pleno la tarea que han elegido. Vos has sido estrella, dejaste huella y además realizaste con plenitud tu tarea como profesora. Eso deja una luz imborrable en quienes fueron los destinatarios de tu función”.
Un calido mensaje también sumó la alumna Araceli Martínez, por lo que al momento de hablar Normita Vitali estaba sumamente emocionada.
El acto concluyó con la entrega de flores, de presentes y por supuesto todos, en ronda, cantando “Estudiantina”.
Vale volver a destacar la presencia de muchos profesores de Educación Física, presentando sus respetos y su cariño para quien, sin ser profesora, en tiempos en que la especialidad era una rareza, se hizo cargo del área y cumplió la función con compromiso, dedicación y bregando siempre por que los alumnos hicieran deportes, entendiendo plenamente todo lo que deja para la formación integral de las personas.
Normita, acompañada de su mamá y de su sobrina, compartió el acto de despedida de la función docente, considerando que la Unidad Académica es su segunda casa y además representa un emblema del querido Colegio Nacional.