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Eduardo Meier: “Nos emociona mucho, a toda la familia, que haya cumplido 50 años un organismo que surgió por la pasión por la música que tenía el tío Bartolomé”.
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Así se refiere Eduardo Meier, hijo de don Agustín y sobrino de Bartolomé Meier, el creador de la Banda de Música, que este fin de semana celebró los 50 años transcurridos de su fundación.
Recuerda cuando, siendo ellos pequeños, su padre se quedaba hasta altas horas de la noche en la cocina de la casa familiar practicando música en el bandoneón, un instrumento casi prohibido por las familias y no muy bien visto por la Iglesia.
“Mi tío y mi padre deben haber tenido música corriéndoles por las venas para desoír lo que los adultos decían y casi ocultándose para no ser escuchados, practicar por cuenta propia la ejecución del bandoneón. Todavía me parece oírlo cuando a las 11 o 12 de la noche, después de tener mi padre largas jornadas de trabajo, nos despertaba el sonido de la música que él estaba practicando en la cocina de nuestra casa”.
Eduardo Meier recuerda cuando su tío Bartolomé Meier, contra viento y marea, resolvió que Coronel Suárez tenía que tener una Banda de Música.
Entonces, Santa María tenía una pequeña fanfarria que coloreaba los actos oficiales, pero la pretensión de Bartolomé era mucho más grande: quería que la banda sonara con la marcialidad que él veía en otras agrupaciones, como la de Bahía Blanca, por ejemplo.
Empezó a traer los instrumentos que se descartaban en esta ciudad. Con suma paciencia, don Raúl Cingolani los reparaba, Bartolomé los ponía a punto y a partir de allí comenzaban a formar parte de la Banda de Música de Coronel Suárez.
“Todavía me parece ver a mi padre con su poncho característico, acompañándonos en cada una de las participaciones en actos y fiestas de Coronel Suárez y la zona, como la Fiesta de San Roque en Tres Arroyos, que duraba tres días y allí estábamos, firmes. Yo estuve tocando 9 años, después tuve que dejar, pero mi hermano Agustín siguió desde el principio. Hoy tengo a mi hermano Luis que ha ingresado a la Banda con 60 años y disfruta en cada una de las presentaciones. También lo tengo a mi hijo que forma parte del grupo estable, que está crecido, suena muy bien, con mucha profesionalidad, tal como le gustaría a mi padre o a mi tío Bartolomé. Por eso sentimos tan cerca y nos emocionamos tanto con estos 50 años que festejó la Banda Bartolomé Meier el fin de semana pasado” concluye Eduardo Meier, rebosante de recuerdos y mucha música.