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Henny Trayles “La creatividad se ha dejado de lado, por que rige el minuto a minuto, el rating exige y entonces nos aferramos a la pelota, al resultado”.

Con 73 años de edad, más de 50 como actriz, más de 40 tratando de hacer reír y “reírme de yo misma” actuó en nuestra ciudad.
Una vitalidad excepcional y una visión de la vida, para pensar y repensar.
“La Vida es un juego, pero no hay aferrarse tanto a la pelota”.

Así como es de diminuta, es de inmensa como actriz y como persona, por lo menos es lo que trasunto en una entrevista que ofreció mientras probaba sonido en el salón de la Asociación Israelita de Coronel Suárez y después del unipersonal en la cena con que fue agasajada por la entidad anfitriona.
Tiene 73 años, según expresa el documento, pero su apariencia, dice otra cosa, producto seguramente de su filosofía de vida, con más de 50 años haciendo reír, a través de un humor “para aprender a reírse de nuestras propias desgracias” como relato después de minimizar el resultado del partido de Argentina-Alemania, que horas antes había visto en el domicilio de la Familia Kleiner.
“Tragedia, más tiempo, igual comedia” insistió con esta frase celebre, al decir que “todo tiene su pro y su contra, desde luego que hubiera preferido un resultado positivo para nuestra selección, pero ahora, el país se pone en marcha otra vez y hay que tomarlo como un juego, la vida continua” expresó la actriz, que habla además con sus gestos y una mirada franca, sincera, fresca que de algún modo son demostrativos de su personalidad.
Al referirse a su carrera con tantos años de experiencia dijo “llevo más de 50 de trabajo, de los cuales, en los últimos 40 estoy tratando de reírme de mi, reírse de uno mismo, reírse con el otro, aprender a reflexionar, reírse de lo que a uno le duele”.
Henny Trayles, afirmó que “pareciera que hay que burlarse del otro, que es un poco lo que pasa en la Argentina en general, burlarse del otro es el humor más fácil, Dios creo el humor para aprender a reírse de nuestras desgracias, por que la vida es un juego y no hay que aferrarse a la pelota”.
“Esa es la prueba, todos nos aferramos al trabajo, a la pareja, nos volvemos adictos y el tema es mantener el centro para poder vivir los diferentes roles, para saber que la vida pasa por uno, dando a los demás, esa es la forma de vivir” expresó mientras se entusiasmaba cada vez más con la charla.
Cuando le preguntamos sobre el humor que hoy prevalece en la televisión, dijo “no conozco otro humor, siempre lo considere al humor limpio, sano, que enriquece al ser humano y no se hacer otro humor, y eso falta, por eso hay que diferenciar lo mediático, hay señores actores y actrices, que no forman parte de este estilo, no tienen pantalla”.
Sobre la aceptación del público sobre esta propuesta de la televisión Argentina, los mediáticos y las preferencias del público, dijo “la gente no siempre elije la programación de los medios, por que el público no es quien digita, digitan los que tienen el poder” y en ese sentido fue imposible no recordar los inicios de la TV.
Recordó la década del 60, la explosión de variedad y creatividad que se originó en aquellos años, donde un grupo de Uruguayos, llegaron a hacer humor al país, sumándose a la calidad que reinaba entonces”.
“Después se buscó más el resultado que la creatividad, se imitó en base a recetas conocidas, donde no hay nada de nuevo, pero en aquel momento era todo creatividad, hoy la cosa no es fácil, la creatividad se ha dejado de lado, por que el minuto a minuto manda y nos volvemos a aferrar a la pelota” expresó la actriz.
“No somos nosotros, hay una crisis por la caída de un sistema de vida, no se da valor a la vida, a la amistad, al otro, hoy todos tenemos que cooperar con el planeta, con el otro, hoy con la computadora no hay historias, no hay respeto por las figuras, con lo que tiene que ver con la cultura, la cultura, es el arte de la vida”.
Cuando le preguntamos si teníamos que tener resignación, por estas formas predominantes, tipo “Cambalache”, categóricamente expresó “resignación no, aceptación de la desvalorización, pero si tu vida es sana, basada en valores, sos honesto, trabajador, buena gente, resignarse no sirve a la mente, pero si a cada uno se le prende esa lamparita de sumar el humor a la espiritualidad se transforma en la esencia de quien somos”.
Después habló del significado de Agripita o la madre judía posesiva, una galería de personajes que desfilaron por el genial espectáculo unipersonal que presento en el salón de la Asociación Israelita.

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