El salón del Sindicato de Trabajadores Municipales fue ornamentado de manera tal que resultaba irreconocible, por su diversidad y buen gusto, para recibir a Silvina quien del brazo de su padre llegó a la fiesta que había sido preparada con toda dedicación por parte de la familia.
La excelente predisposición de la cumpleañera hizo posible que el fotógrafo Juan Schtre se luciera con las mejores imágenes, sumandote al éxito de la reunión, donde la música invadió todo los rincones del salón con un dispositivo de láser que fue un disparador constante para que las mejores coreografías dominen toda la noche, junto al cotillón colorido para acompañar el festejo.
Silvina lució un vestido blanco, sencillo, pero donde prevaleció básicamente la figura y la simpatía de la agasajada que no paró un instante de disfrutar del baile, de los amigos y familiares que sumaron toda la potencia para hacer una fiesta inolvidable.