En el discurso de apertura muy profundo está contenido el firme objetivo que los alienta.
Magdalena Brú expresó que “porque somos concientes de que no somos dueños de la verdad, partimos de la humildad, es desde allí de donde hacemos nuestro aporte a la comunidad al convocar a estas jornadas. Nuestro objetivo es promover nuevas herramientas para todos. Esperamos que esto resulte valioso, agradecemos la presencia de todos ustedes que es muy importante y nos refuerza la importancia de seguir por este camino. Queremos agradecer a Dios, nuestras familias, amigos, instituciones y empresas que nos acompañaron para hacer este proyecto. También a los destacados profesionales de primer nivel, especialistas en cada uno de los temas, que nos acompañan y que generosamente se acercaron a nosotros para llevar a cabo en estas jornadas. A los terapistas de nuestros hijos, a aquellos que están ahora y a aquellos que nos acompañaron en este camino, les damos las gracias por tratarlos con infinito amor. Hubo un día en que cada uno de nosotros se despertó y se encontró con la realidad de tener a un niño diferente. Primero decidimos aceptar el desafío y luego decidimos salir a pelear, a luchar con todas nuestras fuerzas. Tuvimos que replantearnos nuestro mundo y seleccionar lo que era bueno para nuestras familias. Comenzamos a descubrir abordajes y enfoques terapéuticos, con base científica cimentada en el ser humano, en su dignidad, en su desarrollo pleno y en su inserción social. Está demostrado que con estas herramientas se puede mejorar la calidad de vida de nuestras familias e hijos. Estas jornadas permitirán ampliar el conocimiento de la sociedad en general sobre este tema y también para los profesionales de la salud y la educación, haciendo disminuir las dificultades. Ser flexibles al cambio, tener apertura desde el corazón, nos facilita el encuentro con el otro”.
Por su parte, Virginia Long expresó que “estas Jornadas son también una forma de rendir homenaje a nuestro Bicentenario. Muchos son los grandes y concretos desafíos que deberemos afrontar en los próximos años, si aspiramos a desarrollarnos en función de ideales elevados y a crecer en sintonía con el espíritu de la vida. Este es nuestro propósito y aquí estamos compartiendo este ideal”.

 

 

 

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