Habrá alrededor de 85.000 colmenas que estarán recibiendo esta ayuda, lo que no es la salvación pero que ayuda un poco para quienes están en una situación muy comprometida”.
Consultado en torno a si este subsidio debía devolverse o no –la ayuda del año pasado se había resuelto que se devolviera- explicó que “este es sin devolución. La ayuda que vino el año pasado en azúcar, nosotros queríamos hacer un fondo. No se devolvía el azúcar, ni al Gobierno ni al Municipio, sino se constituía un fondo común para los mismos productores que estaban o están en situación comprometida, para volver a usarlo entre nosotros mismos. La Mesa Apícola decidirá de aquí en más como se resolverá ese tema, ya que la devolución estaba prevista para fin de esta temporada, cuando hay muchos productores que siguen en situación muy complicada. Entonces será la Mesa Apícola quien resolverá si se da de prórroga un año más”.
Sobre el estado actual de la campaña de miel expresó que: “Como nuestra actividad depende de la lluvia, ya se puede ver que también estamos sufriendo en toda la zona las consecuencias de la sequía. Se han revertido un poco las situaciones para quienes trasladas las colmenas. Pero los productores que están estables, que no trasladan sus colmenas, están pasando un momento muy preocupante. Para todos aquellos productores apícolas que viajamos atrás de la floración y hacemos un sacrificio físico y un gasto muy importante, han tenido una diferencia muy importante, compensada también con el precio de exportación de este producto”.