Con este convencimiento habló Norma Gaab, quien es una de las creadoras y referentes de este Centro Comunitario que está en Santa Trinidad y que el año pasado cumplió 10 años de funcionamiento.
El mismo surgió por impulso del padre Carlos Amuchástegui y un reducido grupo de mujeres, que encabezaba Norma Gaab. Y fue en respuesta a la crisis que entonces se vivía en el país.
Este año, por primera vez, los niños y adolescentes que concurren al Centro tienen no solamente el almuerzo los días sábados, sino que se les ofrece una colonia de vacaciones dentro del Plan Escuelas Abiertas, con 6 profesores y docentes conseguidos a través del CEF Nº 70.
Utilizando varias piletas de lona al lugar concurren cada día 80 niños que disfrutan de todas las actividades que se les proponen.
Norma Gaab, consultada por La Nueva Radio, habló de esto, de la satisfacción y la alegría por poder ofrecer vacaciones seguras y recreación en el agua, para que muchas familias y muchos padres se queden tranquilos, mientras continúan trabajando en sus labores habituales y sus hijos están en el receso escolar.
Pero la oportunidad fue propicia para que Norma Gaab dijera que se había dejado sin efecto lo que fue una promesa en el marco de las elecciones y que solo se cumplió durante 5 ó 6 meses: “La Municipalidad nos dejó sin el subsidio que nos entregaba y que servía para pagar el trabajo que yo llevo a cabo en el Centro Comunitario, y con lo que también se pagaba a la profesora que hacía el apoyo escolar durante la temporada de clases. En su momento prometieron un contrato que después me informaron no se podía cumplir por ser el Centro una institución privada, pero que nos llegó por unos 4, 5 y 6 meses en forma de subsidio. Ahora nos hemos quedado sin nada; yo voy a seguir trabajando ad honorem, mientras un grupo de mujeres, muy comprometidas con la labor social que se lleva a cabo en el lugar, están armando una serie de proyectos para continuar con el servicio a las familias y niños que nos necesitan”.