El contenido de esta página requiere una versión más reciente de Adobe Flash Player.

Obtener Adobe Flash Player

El contenido de esta página requiere una versión más reciente de Adobe Flash Player.

Obtener Adobe Flash Player

El contenido de esta página requiere una versión más reciente de Adobe Flash Player.

Obtener Adobe Flash Player

Una testigo aseguró haber observado a Ravainera y Goyeneche en el Corsa.

 

En su relato, una vecina de la zona rural de General La Madrid, afirmó que durante la tarde del 27 de agosto de 2000, se cruzó con el automóvil --que sería de las víctimas--, ocupado por cuatro personas. Tiempo después reconoció a dos de ellas. El debate continuará el próximo martes.

Durante la tarde del 27 de agosto de 2000 --horas después de cometerse el doble crimen--, Gustavo Javier Ravainera y el chapista suarense Martín Oscar Goyeneche, condenado por la instigación al robo del automóvil que ocupaban María Victoria Chiaradía y Horacio Iglesia Brown, fueron vistos mientras circulaban con el coche, por un camino vecinal de General La Madrid.
Así lo aseguró ayer, de manera clara y contundente, una mujer que vive en la zona rural de ese distrito y declaró como testigo de identidad reservada --denominada "RR"--, a lo largo de 46 minutos.
Esa fue la nota saliente de la séptima jornada del juicio oral que se les sigue a "El Lagarto" Ravainera (40), a Héctor Hugo Fernández (44) y a Gustavo Enrique Aguilar --el próximo domingo cumplirá 45 años--, por los crímenes de la pareja de novios bahiense.
Una vez finalizado el único testimonio de la jornada, minutos después de mediodía, los fiscales Eduardo d'Empaire y Claudia Lorenzo, desistieron de las declaraciones de Mario Gabriel Ullman, Norberto Horacio Molina y Omar René Santarelli e informaron que no había más testigos previstos para la víspera ni para hoy.
Por ese motivo, el Tribunal en lo Criminal Nº 3, integrado para este caso por los jueces Raúl Guillermo López Camelo, Alejandro Salvador Cantaro y Gabriel Luis Rojas, decidió pasar a un cuarto intermedio hasta el próximo martes, a las 9.30, ya que el lunes hay asueto por celebrarse el Día del Empleado Judicial.
Ravainera ya había sido imputado, días atrás, por otros dos testigos, quienes, por comentarios de terceros, lo vincularon directamente con la ejecución de los asesinatos.
Un día después, otros dos declarantes de identidad reservada afirmaron haber escuchado una conversación entre Aguilar y Fernández, también referida a la manera en que mataron a la pareja.
Pero "RR" fue más allá y, además de incriminar a "El Lagarto", ratificó una sospecha que sostenían los familiares de las víctimas, en cuanto a la posible intervención directa de Martín Goyeneche en una parte medular del trágico atraco.

Uno se agachó, otro se tapó
La testigo "RR" expresó que aquel domingo 27 de agosto de 2000 --no dijo la fecha, pero la ubicó como uno o dos días antes de la aparición del coche, encontrado el martes 29-- se dirigía desde su campo hacia General La Madrid, para comprar una garrafa, porque se había quedado sin gas.
En una camioneta Ford F-100 celeste, que conducía su suegro, la mujer emprendió el viaje, poco antes de las 18 y, en esas circunstancias, se cruzó por el camino vecinal de tierra con un Chevrolet Corsa gris, que se aproximaba, a paso lento y en sentido contrario, como procedente de la ruta 86.
"Venían cuatro personas y, cuando me acerco al auto, el del acompañante se agacha y veo a tres. El que conduce y al que está atrás, del lado izquierdo, porque la otra persona que iba atrás (del conductor), se tapaba la cara con el brazo y miró dos veces para afuera", expresó.
Manifestó que el coche "estaba muy impecable, brilloso", aunque no supo decir si tenía colocadas las patentes, porque sólo observó a sus ocupantes, teniendo en cuenta que ya sabía de la desaparición de María Victoria y Horacio, aunque dentro del coche no observó mujeres.
"No vi a ninguna parejita y me di cuenta que el auto no era de La Madrid, porque nos conocemos todos", explicó.
Sobre el conductor, detalló que tenía el aspecto de ser "alto, delgado, con el pelo recogido con una colita y una barba candado; tenía camisa blanca y no sé si campera o saco oscuro y camisa blanca".
Respecto de la persona que alcanzó a ver del lado opuesto del asiento trasero, manifestó que "era rubia, de ojos celestes y tenía una campera té con leche, camisita y jean", para agregar que iba sentado, pero como estirado hacia abajo, con las manos entre las piernas.

Parado en un cabaret
"Cuando regresé, vi que ese vehículo estaba parado en un cabaret que queda, de mi casa, a unos 250 metros en línea recta", sostuvo, para agregar que su marido, a las 6 del día siguiente, observó al vehículo en el lugar y "vio que las personas se despedían, al salir del cabaret".
Advirtió que dicho local nocturno, para esa fecha, estaba clausurado al público, "porque habían encontrado una menor", aunque su dueño, de apellido Fernández --ya fallecido-- vivía allí.
Cuando el fiscal D'Empaire le preguntó si había identificado a alguien del Corsa, "RR" respondió: "Identifiqué al que conducía el vehículo; después supe por los diarios... el señor Ravainera. No lo conocía de antes".
Explicó que lo identificó, de manera indudable, por medio de fotografías y recordó que, al verlo circular en el coche, lo observó como "una persona muy seria, muy fría, que ni pestañeaba y miraba para adelante".
Esa descripción es coincidente con la que había aportado el comisario general retirado Héctor Rodolfo Díaz, investigador del caso, quien definió a "El Lagarto" como "más frío que un 'bufoso'".
Sobre el hombre rubio, explicó que lo volvió a ver en una foto de un periódico de Coronel Suárez, en 2007: "Era el señor Goyeneche", afirmó.
Advirtió, incluso, que hace poco menos de un mes, cuando regresaba con su marido hacia General La Madrid, volvió a ver al chapista en Coronel Suárez, "entrando en un taller mecánico que está enfrente de las vías (coincide con la ubicación del establecimiento de Goyeneche). Era el mismo que iba en el vehículo".
"RR" relató que recién declaró lo que sabía en 2005, porque para esa fecha cambiaron de comisario en General La Madrid y con el anterior, de apellido Puente, no tenía confianza.
Al asumir una policía de apellido Casas, la testigo se decidió a relatar su verdad, según dijo.
Interrogada por el abogado Juan José Martínez, defensor de Ravainera, la mujer admitió que nunca le exhibieron el Chevrolet Corsa de las víctimas, aunque el que ella vio en las fotos, ya abandonado, "es un Corsa gris, de cuatro puertas", igual al que observó horas después del doble crimen.

No estuvo. Llamativamente, por primera vez desde que se inició el juicio, uno de los tres imputados no estuvo presente en la sala de debate. Se trata de Gustavo Javier Ravainera, quien, según manifestó su abogado defensor, Juan José Martínez, "está en la alcaidía, pero no viene por una indisposición transitoria".

Héctor Fernández insistió con la rinoscopía
En el inicio de la séptima jornada del juicio oral, Héctor Hugo Fernández pidió la palabra para reiterar un planteo inicial de su abogado, el doctor Luis María De Mira, para que se le realice una rinoscopía.
El acusado pretende que, de esa manera, quede establecido que nunca consumió drogas, con el fin de refutar las declaraciones de los dos testigos de identidad reservada que comparecieron el miércoles, y que no sólo lo relacionaron con el doble crimen, sino que aseguraron que consumía cocaína.
"Averigüé con dos bioquímicas y éstas dijeron que una persona que consumió drogas, en diez años de abstinencia, se detecta el consumo, porque quedan restos en las fosas nasales", dijo.
"La preocupación mía es que en dos años de abstinencia (está detenido desde octubre de 2007), hay un 99,9 por ciento de determinar si (se) consumió o no", afirmó el procesado.
De todas maneras, su exposición fue interrumpida por el juez Raúl Guillermo López Camelo, quien le aclaró que el tribunal, oportunamente, había resuelto en forma negativa ese pedido de prueba y que su pretensión podría ser evacuada por medio de otra causa.

Fuente: www.lanueva.com (La Nueva Provincia)

- - La Nueva Radio Suárez - - 101.3 Mhz. - - LRM 818 - 02926-430005 - -