Debo enfrentar dos problemas para elaborar una respuesta ordenada.
El primer problema visible es la ignorancia del tema tratado por parte del Concejal, y el segundo es la cobarde forma de proceder por parte del anónimo profesional, supuestamente médico, supuestamente informante del supuestamente preocupado Concejal por la salud de la población.
Los procesos de esterilización en el Hospital se realizaron en forma correcta.
Todo el material esterilizado posee testigos que viran en su color indicando que el proceso se realizó satisfactoriamente.
Cuando no se pudo esterilizar en el Hospital por no hallarse el autoclave en condiciones operativas, se realizó en proceso en el autoclave de la Clínica Coronel Suárez y en el del Hospital de Huanguelén.
En dichos lugares también los correspondientes testigos corroboraron que fueron esterilizados adecuadamente.
Tanto la esterilización como distintos aspectos de cada cirugía en particular (tiempos quirúrgicos, hematomas, abuso de electrocoagulación, etc.), inmunodepresión o desnutrición del paciente y normas generales del proceder en quirófano, evidencian que la esterilización es un factor que ha sido bien controlado en cuanto al tema que nos ocupa.
Todas estas medidas son contribuciones para que se reduzcan notablemente los porcentajes de infecciones quirúrgicas, pero de ninguna manera este porcentaje puede llegar a cero.
Cada caso de infección quirúrgica que se produce en el Hospital debe ser notificada al menos en la historia clínica y en caso que se superen la cantidad habitual de las mismas, la notificación debe ser realizada por escrito por el profesional a esta dirección.
Llama la atención que un solo profesional sugiera a sus pacientes que no se operen en el Hospital, entre veinte cirujanos de distintas especialidades.
Esta es una conducta (de ser así) cobarde, dado que se oculta no contribuyendo a solucionar el supuesto problema sino que confunde y alarma inútilmente a la población.
Con ánimo de contribuir a una solución y no de crear problemas inútilmente, aconsejo al protagonista que tome conciencia del daño que produce en la opinión pública y en los que trabajan en el Hospital, que realice un informe, o que dicho detalle se lo facilite el profesional indicado pero no mencionado, en cuanto a los casos en que se produjeron las infecciones, las circunstancias y las fechas, dado que se supone que deben existir en su poder.
De no proceder así, se debilita el argumento de que lo que se persiga sea un alerta de utilidad a la población, entreviéndose un propósito de protagonismo político.
Si, señor periodista del Diario Nuevo Día: está garantizada la asepsia en el Hospital.

Dra. Amalia Kirchheim – Directora Hospital Municipal.