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Centro Regional de Neonatología en el Hospital Municipal.

 

La evaluación del año transcurrido en el Servicio, a cargo de Mónica Morales, Jefa de Enfermeras.
“Estamos teniendo un promedio de diez bebés por día, a veces más a veces menos. En estos momentos tenemos menos, si comparamos el período de invierno, cuando tuvimos chicos con bronquiolitis”.

“El recurso humano está completo, el material también. Estamos bien. Una vez que se volvió a abrir la Neonatología a la región el índice ocupacional volvió a aumentar y tenemos los ingresos que corresponden a la época”. Esto lo dijo la Lic. Mónica Morales, Jefa de Enfermeras de la Neonatología Regional que funciona en el Hospital Municipal.
Recordó que “el objetivo del servicio es disminuir la morbi-mortalidad y el ingreso irrestricto, que implica que ingresen todos los bebés de la región con o sin obra social, que necesiten este tipo de servicio. Esos son los dos objetivos principales que tenemos”.
En cuanto a la disminución de la morbi-mortalidad del recién nacido, indicó que “las estadísticas dan cuenta que ha disminuido muchísimo. Una de las cosas que ha contribuido a esto es la creación del Lactario, en el cual se le da leche de madre a todos los recién nacidos enfermos o que tenemos en la Neo, gracias a que están las bombas extractoras de leche, y las voluntarias realizando el acompañamiento a las madres. Es un muy buen trabajo, no solamente porque las mamás tienen una buena producción de leche, sino por el acompañamiento que hacen las voluntarias, que es muy valioso”.
Consultada en torno al trabajo para posibilitar el contacto de las familias con el recién nacido prematuro, respondió que “nosotros queremos, alguna vez, acreditar como una maternidad centrada en la familia. El ingreso de los padres es irrestricto, ingresan las 24 horas del día, el papá y la mamá. Los fines de semana ingresan los hermanitos y los abuelos, que lo hacen también en el momento en que recibimos al bebé en la Neo. Viene a conocer al bebé toda la familia”.
La Jefa de Enfermería del área comentó luego que “después hacemos que se respete la norma de ingreso para el resto de la familia; pero para los padres es irrestricto. Tíos no, porque implica mucha cantidad. Pero los abuelos y los hermanitos los fines de semana. Para ser una maternidad centrada en la familia hay que certificarlo. A nosotros nos falta mucho todavía. La certificación la hace el Ministerio de Salud, con el apoyo de UNICEF. En estos casos, en lo que más se hace hincapié, es en la no utilización de fórmulas lácteas, utilizar la lactancia materna, y el ingreso irrestricto; implica que el Hospital tenga una política con respecto a todos estos temas. Y por supuesto se suman normas específicas. Cuando digo que falta mucho para lograr esto es porque involucra a mucha gente, se trata de una política aceptada por todos, desde la Dirección del Hospital y, por ejemplo, que todo el mundo realice el curso de lactancia materna, para que todos los que trabajan en el Hospital sean promotores de la lactancia, estas serían algunas de las cuestiones en las que hay que seguir trabajando”.
Lo que se promueve es el contacto del bebé nacido prematuro con su núcleo familiar, desde el contacto piel a piel, aunque el niño esté entubado.
“Disminuye los días de internación, crece más rápido, en definitiva, disminuye la morbilidad, son niños que están muy integrados a la familia a la que pertenecen, a pesar de estar en una cuna de cristal, internados en un servicio de cuidados intensivos”, dijo la Lic. Mónica Morales.

 
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