Se emocionó visiblemente Guillermo Sol al consultarlo sobre el conflicto desatado entre los padres, ex Cooperadores de la escuelita rural La Uruguaya, cerrada recientemente por no contar con matrícula de alumnos, y el Consejo Escolar de Coronel Suárez.
Es que ha sido alumno de ese establecimiento educativo. Su madre es la madrina de la escuela.
Puso el énfasis en que el mayor error lo había cometido la ex Directora del establecimiento, ahora Directora de la Escuela Nº 6 de Cura Malal, hacia donde fueron los tres aires acondicionado que estaban instalados en ese establecimiento educativo.
“La realidad es que este suceso, para mí, es sumamente lastimoso. Yo soy un ex alumno de la escuelita La Uruguaya. Mi madre es la madrina. Cuando se hizo una gran fiesta en el campo de mi padre, con todo el acompañamiento de la comunidad de la escuela, fue con el objetivo de conseguir fondos para poner las aberturas y el piso de la escuela. Entonces también se pintó y se compró mucho de su mobiliario histórico. Por eso es lastimoso que esté pasando esto”.
Consideró que “hay un error muy grande de la ex Directora de la escuela, porque es una profesional, que conoce cómo funciona el sistema, ella sabe que no puede tomar bienes que están inventariados en una escuela, que hay un convenio para la guarda de esos bienes, firmados por los Cooperadores. Tomarlo de una escuela y llevarlo a otra escuela, por más altruista que sea. Yo comparto totalmente el hecho que los bienes de la escuela La Uruguaya hoy sean de utilidad en otra escuela. Qué mejor que vayamos dándoles mejoras a los chicos de Cura Malal, pero ¿por qué no se hizo como corresponde? Con una nota como correspondía y que los Consejeros Escolares trataran el tema, tomaran la determinación de autorizar y sacaran los bienes de una escuela y ponerlos en el inventario de otra” dijo Sol.
Luego agregó que “la ex Directora de La Uruguaya y hoy Directora de la Escuela de Cura Malal debió haber tomado cartas en asesorar a los Cooperadores. La gente que acompaña a la escuela no tiene por qué conocer la normativa en la minuciosidad del tema, pero si ella. Lamentablemente tomaron esa determinación sin consentimiento del Consejo Escolar”.
“Eso es para mí donde radica el principal error. Luego los procedimientos. Yo no comporto el procedimiento que llevaron adelante los Consejeros Escolares. Yo hubiese llamado a la comunidad de la escuelita, a la ex Directora, a una reunión para decirle que se equivocó, que cometió un error y lo hubiesen subsanado con las respetivas notas, generando el cambio de esos bienes como corresponde. Y con respecto al resto de los bienes hubiera propuesto que queden dentro de la escuela y que se vayan viendo las necesidades de los otros establecimientos. Una cosa es dialogar, consensuar, encontrarles una salida dialogada, y otra cosa es llevar las cosas de prepo, que para mí es lastimoso. Me pongo del lado de los Cooperadores, de la gente del barrio y la entiendo totalmente”.