La Presidenta actual del Taller Protegido, Clara Herrera de Osorio, destacó que “todo el trabajo que se lleva a cabo en esta institución es una continuidad. Veo la misma gente que hace años estaba trabajando. Veo a Delia (Persischini), Coty (Carpini), Norma (Giacomolli) y muchos otros que han estado trabajando en el Taller, que han logrado muchísimo, más de lo que estamos haciendo nosotros ahora. Es maravilloso ver a los chicos cómo trabajan, cómo interactúan, se ha logrado sacarlos a la calle, al desfile, algo que a ellos les gusta, les encanta. Así uno ve el reconocimiento que tiene la comunidad hacia los jóvenes que están acá trabajando día a día”.
Más adelante dijo que “los chicos que están acá nos demuestran día a día el amor, el cariño, la sonrisa cuando uno llega. Eso se logra por el trabajo de quienes están todos los días trabajando acá, como los instructores y la Directora, que es el alma máter de esta casa. Hoy quiero reconocer especialmente a los instructores que están trabajando, algunos desde hace 29 años, otros desde hace 24 años, otros desde hace 30 años. Ellos también merecen el día del cumpleaños un reconocimiento de la Comisión Directiva”.
La Presidenta cerró su discurso agradeciendo especialmente “a la comunidad, que nos atienden, cuando pedimos una ayuda la tenemos”.
Una muy querida Presidenta de la Comisión Directiva, Delia Persischini, dijo que sentía “una alegría inmensa ver que la gente sigue apoyando toda la tarea de esta hermosa institución. Yo estuve a prueba, de Don Pablo, que me persiguió dos años, para que me hiciera cargo de la Comisión. Yo como maestra rural nunca había estado en contacto con esta institución. Quince años pasaron y me fui por mi problema de rodillas, que ya no me daban más, porque si no hubiera seguido por mucho tiempo más”. Luego Delia, quien se encontraba acompañada de su esposo, consideró que “pero la posta está muy segura, no le erramos cuando elegimos los colaboradores. Con Ricardo Moccero hemos tenido años de lucha, de encuentros y desencuentros, pero finalmente juntos pudimos inaugurar este hermoso edificio, que por lo que veo hay que seguir manteniéndolo y trabajar en pos de eso. Es un placer inmenso estar compartiendo con ustedes esto. Chicos –dirigiéndose a los operarios-, están maravillosos. He visto chicos entrar a este Taller que ni siquiera podían dar un paso sin tener alguien que los sostuviera. Y hoy los vi bailando. Eso es algo maravilloso. Solo el que está trabajando con esto sabe el esfuerzo que es lograr eso. Fue realmente emocionante”.