Hace unos días atrás hubo una nota pública a la ciudadanía firmada por quien es la Directora del Hospital Municipal.
En la misma, en su parte central, la Dra. Marta Travería entiende que “resulta destructivo y contradictorio que se utilicen las redes sociales y o medios de comunicación para descalificar al personal, quienes a pesar de las circunstancias intentan realizar de manera responsable su labor”.
A este respecto, la titular del Hospital Municipal de Coronel Suárez dijo a La Nueva Radio Suárez que “escribo cuando considero necesario, y en esta oportunidad me pareció oportuno y necesario. Se están utilizando muchas veces y en forma injusta e innecesaria, porque las puertas de la dirección están abiertas para todo el personal, familiares o pacientes para presentar las quejas y reclamos. Todas se escuchan y se llegan a un acuerdo. Todo lo que está mal hecho de las puertas para adentro se trata, se ha llegado a hacer sumarios administrativos y se trata de solucionar de la mejor forma posible. Lo que me parece mal es la descalificación personal. Una cuestión es la función que tienen que hacer todos los individuos dentro del ámbito laboral y otra cosa es la descalificación como persona. Eso no se puede tolerar dentro de una institución, sea un hospital o alguna otra. Puedo estar en desacuerdo y podemos entender la problemática y explicarnos mutuamente la situación. Lo que consideramos verdades a veces está teñida de una subjetividad que tiene que ver con la situación, con mi forma, mi historia y mi contexto. Muchas veces las redes sociales y algunos medios son utilizados por personas que en lugar de construir lo usan por una cuestión de plana, de exhibicionismo, de destruir, sin objetivo de construir. Hay mucha gente que trabaja muy bien, desde hace muchísimos años en el Hospital. Las puertas de la dirección están abierta para escuchar, sobre todo aquello que tenga que ser tratado”.
Más adelante, y consultada sobre la situación en el Hospital Municipal de Coronel Suárez, la Dra. Marta Travería dijo a La Nueva Radio Suárez que “en lo institucional, en un primer tiempo, tratamos de sacar a la luz todo lo que nos estaba pasando como Hospital. Lo edilicio viene de años. Nada de lo que nos está pasando ahora viene desde hace pocos meses. Venimos acarreando cosas desde hace muchísimo tiempo atrás. En estos momentos se están ejecutando obras por casi 2 millones de pesos, que está siendo sacado del Fondo de Infraestructura Municipal dado por la Provincia y algo del Fondo Sojero, para refaccionar parte de la instalación”.
En este sentido informó que “se está haciendo la instalación de 550 metros de cañería, con la compra de los artefactos para ventilaciones, en la obra de gas, que nos lleva alrededor de 460 mil pesos. Estamos impermeabilizando toda la losa del Hospital, que son 2.600 m2, llevamos más del 40% de esa obra. Está proyectado impermeabilizar los cielorrasos. Se compró la caldera nueva, de 450 mil calorías, con un costo de 500 mil pesos. Se está haciendo la cañería y se compraron también cuatro bombas. En estos próximos días llega la caldera, contratamos un foguista de otra localidad para sacar la caldera vieja y poner la caldera nueva. Se han colocado nuevos timbres inalámbricos en las habitaciones y los baños. Sale a licitación la semana que viene la obra de instalación de un generador eléctrico, con construcción de una cabina nueva, esto último con el costo de 2 millones de pesos. En estos primeros ocho meses todo esto me parece un avance importantísimo, aunque no se esté viendo. Ha llevado años que se hiciera y lo estamos llevando a cabo en estos momentos, con vistas a terminar todo hacia septiembre, no se puede hablar que no se está avanzando y que no se están proyectando obras a corto, mediano y largo plazo, porque eso no es así”.
Sobre la preocupación que en su momento la Directora del Hospital planteó a los Concejales, la Dra. Marta Travería dijo que “es verdad que en algún momento los quirófanos estuvieron sin luz y todo lo que uno transite es la realidad. Se corta la luz cada tanto, por unos segundos, pero esto no debería suceder. En ese momento se cortó la luz y volvió a aparecer de manera espontánea. Fue por problemas del techo, ni más ni menos. Estas situaciones, ¡cómo no me van a preocupar! Yo quisiera haber entrado a un Hospital como es el de Pigüé o el de Coronel Pringles. Ojalá nuestra gestión hubiese empezado con todo andando. En esos lugares que mencioné ya está todo sobre rieles, todo lo que nosotros estamos viviendo ahora ellos lo han vivido hace unos años atrás. Con una decisión política importante hace años atrás, donde fueron encaminando la situación desde lo edilicio hasta lo asistencial”.
Agregó que “cuando uno tiene armados los tres ejes: asistencial, institucional y administrativo, no queda más que gestionar sobre algo que ya está encaminado. El problema es que veníamos como muy lentos, nos tenemos que detener. Es injusto que por una cuestión política, porque alguien quiera sacar algún rédito, no vea lo que se está haciendo. No vea lo que se está logrando en nuestra gestión. Lo económico y lo financiero nos está afectando muchísimo, porque estamos gestionando bajo la escasez. Hoy sería un placer estar hablando sólo desde lo asistencial”.
Consultada si en este contexto peligra la prestación de salud a la gente, respondió con firmeza que “no, para nada. No va a peligrar nunca, en la medida que uno esté, que seamos conscientes y que sigamos teniendo la decisión política desde nuestro lugar de que esto no suceda. Si en algún momento vemos que lo político no nos acompaña tomaremos otras decisiones, pero en este momento estamos tratando que el Hospital siga funcionando. Y va a seguir funcionando porque es nuestra decisión”.
Insistió en que se gestiona “desde la urgencia y desde la emergencia. Las situaciones que se viven cotidianamente a veces es difícil entender desde otro lugar. Nuestro presupuesto está afectado y nos queda muy poco presupuesto hacia adelante. Las políticas sanitarias tienen que estar dadas por una decisión política y por el Estado. El Estado no puede estar al margen de los planes sanitarios de cualquier lugar. Pero también el Estado, y las prestaciones privadas (obras sociales, las prepagas), tienen que ser conscientes que si ellos no gestionan y funcionan bien son corresponsables de lo institucional que es el Estado. Todos somos corresponsables de la salud de la población. Las obras sociales, en su mala gestión, en no gestionar como corresponde y no prestar la asistencia que corresponde, están dañando al afiliado y están haciendo que el Estado tenga que funcionar porque no están funcionando ellos como corresponde”.
Coincidió en que urge tener un Secretario de Salud: “estoy hablando con los distintos actores que intervienen en el Hospital y en la salud para llegar a un acuerdo, porque quiero que la gestión sea lo más participativa posible. Llegaremos a encontrar a un Director o a un Secretario y veremos cómo nos podemos mover. Yo tengo claro adónde quiero llegar, tengo metas claras, pero todo esto hay que acompañarlo”.
¿Bombos en el Hospital?
Fue el miércoles por la mañana, en momentos en que comenzaba a realizarse una nutrida asamblea de trabajadores del área.
En esa circunstancia hubo uno de los trabajadores que ingresó con uno de los bombos y los empezó a hacer sonar.
Hubo una concurrencia inmediata de la Directora del Hospital, quien pidió que no se utilice ese instrumento, que viene muy bien para hacer oír el reclamo a la población, pero que resulta inusitado que se utilice en el Hospital, donde hay personas de todas las edades internadas y otros que concurren para atender su salud. Resulta insalubre.
Consultada la Dra. Travería al respecto indicó que “en el conflicto del Sindicato generalmente han venido al Hospital Municipal para hacer asambleas informativas que duran muy poco tiempo. Se les informa a los trabajadores, porque los empleados del Hospital no salen prácticamente, están cubriendo su tarea y muy pocas veces concurren porque tienen una responsabilidad, son conscientes de la misma”.
La funcionaria explicó que “por eso vienen al Hospital los trabajadores a hacer las asambleas informativas. Hubo alguien que trajo bombos y los utilizó dentro del Hospital, en un área en la cual no hay pacientes internados, pero el sonido se transmite, por lo que se escucha en el resto del establecimiento. Motivo por el cual, con buen tino, se les pidió en forma pacífica que se retiraran los bombos y que no los tocaran. La gente accedió y entendió que no era ubicado ni era procedente que los bombos estuvieran dentro del Hospital”.