En Isidoro Espacio de Arte se llevó a cabo durante toda la semana pasada la denominada residencia de invierno, que estuvo a cargo de Diana Aisenberg, formadora de la nueva generación de artistas contemporáneos de nuestro país, quien brindó esta propuesta en nuestra ciudad para 15 artistas provenientes de Misiones, Córdoba, Mar del Plata, Olavarria, Bahía Blanca, Laprida, Sierras Bayas y Pehuajó.
La actividad concluyó en la noche del viernes con un Estudio Abierto, donde el público tuvo la gran oportunidad de recorrer los talleres y apreciar en toda su dimensión los proyectos de los artistas surgidos a partir de esta novedosa iniciativa, que como se sabe durante la semana artistas de Coronel Suárez y la región participaron de las charlas y actividades junto a los artistas residentes, compartiendo lo aprendido y generando nuevos lazos.
Con la presencia de Sonia Gomez Directora de Isidoro junto a “Kike” Bauer y todos los artistas que de nuestra ciudad, de la zona y otros lugares mas alejados se cumplió el acto de evaluación de esta primer Residencia en Isidoro, donde inicialmente se destaco la presencia de una fuerte figura como es Diana Aisenberg ya conocida en nuestro medio por sus frecuentes presencia en Isidoro a lo largo de los 8 años de vigencia que tiene el espacio de arte.
Diana Aisenberg es un artista visual nacida en Buenos Aires, su obra nace en el dibujo y la pintura e investiga las relaciones entre arte y educación a través de su acción docente. Crea proyectos que incluyen artistas y no artistas dedicada a la docencia de arte, destacándose en la formación de artistas y en la programación y organización de jornadas experimentales para principiantes y avanzados, es decir una figura de relieve nacional para el dictado de esta residencia que se desarrollo durante tda la semana pasada en un proyecto común de investigación.
Sonia Gómez agradeció su presencia, la todos los artistas que lograron maravillas de gran avanzada creativa mientras que la mayoría de ellos, tuvo palabras de elogió a la organización, la planificación, el resultado final que fue de alto impacto, teniendo en cuenta que muchos de ellos no se conocían entre si y lograron finalmente una química que se suma al resultado final de la experiencia.
Previo al acto de clausura Diana Aisenberg fue entrevistada por la Nueva Radio Suárez y no dejo de elogiar el crecimiento de Isidoro, su propuesta referencial no sola en la ciudad y la región, sino nacional, hablo del arte, del presente y lo definió como algo infinito que no tiene techo, ni horizonte.
“Durante la residencia se ha logrado construir un inventario de nuestra obra, con el objetivo de desplegar los diferentes recursos que se utilizan, nos adentramos en ella y la desmenuzamos resultado oxigenante y revelador confirmando saberes y abriendo siempre puertas.
Durante la residencia no tomamos el tiempo para conocer los procesos de los colegas descubriendo momentos comunes, estudiando inclusive como hacemos lo que hacemos por lo cual hacer artes en esto0s niveles de énfasis es una fuente de felicidad, fue una semana vivida intensamente bajo la gestión de Isidoro, Espacio de arte de Coronel Suárez, bajo la coordinación de Sonia Gomez, la colaboración de Francisco Salerno y Kike Bauer bajo la tutoría de Diana Aisenberg.
“Fue una semana muy intensa con muchísimo trabajo, una conjunción de seres apasionados que removieron el aire, fue muy enriquecedor, desde ya verlos trabajar y convivir, una Residencia es un formato que se hace en todas las universidades del mundo que lo generan grandes museos, es un formato de arte muy reconocido internacionalmente con muchas donde cada una tiene su estilo, se demuestra la magia de la gran voluntad, de sumar saberes, compartir por ejemplo nosotros hicimos un ejercicio muy hermoso y leemos por ejemplo un libro entre todos y cada repasa un capitulo e intercambiar, una experiencia donde quince personas estén leyendo un mismo libro, suma mucho donde todos terminan charlando y empieza a convertirse en un tema común”.
Luego la curadora de esta Residencia en Isidoro considero que “El arte no tiene techo, marca el sin techo de la posibilidad del crecimiento del hombre, es el modelo que tenemos con la gran posibilidad de crecimiento y creación, el techo por lo general lo ponemos nosotros, limitaciones, de voces torturantes, que te imponen: tenes que hacer esto, arte es tal cosa, es así, de esta manera, voces que uno tiene incorporados y hay que decirles callarte voz, lo voy a hacer como yo digo y allí empieza el arte, para dentro, para fuera, no se sabe” explico Diana Aisenberg tras esta residencia que ha resultado de gran trascendencia artística en nuestra ciudad.
Participaron Mónica Saint Martín de Laprida, Ana Paula Hall de Coronel Suárez, Daniel Fitte de Sierras Bayas, Gustavo Bustamante de Pehuajó, Romina Tejerina de Bahía Blanca, Maria Gabriela Chantar de Olavarria, Emiliano Montani de Mar del Plata, Loli Kloberdanz de Mar del Plata, Yamila Leal de Sierras Bayas, Sofía Watson de La Carlota, Camila Sánchez de Mar del Plata, Soledad Rolleri de Olavarria, Silvia Alarcón de Posadas y Kike Bauer de Coronel Suárez.
Posaron todos juntos tras el acto donde el publico pudo intercambiar opiniones con los artistas, recorrer los talleres, apreciar los resultados que se montaron en cada una de las salas de Isidoro.