El viernes, al mediodía, la Delegación Regional del Ministerio de Trabajo estableció la conciliación obligatoria en el conflicto municipal. Esto abre un espacio de quince días de negociación entre las partes.
Consultado Rubén Allende, dirigente gremial, anticipó sobre esta cuestión que “el estado de alerta, movilización y asamblea permanente lo retomamos el 28 de marzo por incumplimiento del Ejecutivo al acuerdo firmado el 22 de enero. En enero habíamos arrancado el conflicto por un incumplimiento del Ejecutivo del acta firmada el 23 de diciembre. Se mantiene tan vivo el conflicto porque el Ejecutivo firma algo y después no lo cumple. Estamos en estas instancias donde el Ministerio de Trabajo ve que no levantamos la asamblea nosotros porque el Ejecutivo no se sienta a resolver los problemas. Y el Ejecutivo no se quiere sentar a resolver los problemas si nosotros no levantamos la asamblea. Y así podríamos seguir eternamente. Por eso, una manera de avanzar en la resolución de los problemas que está planteando el empleado municipal es la conciliación obligatoria. Que no necesariamente uno lo tiene que aceptar, porque estamos en estado de alerta, movilización y asamblea permanente. Nosotros negamos que se hayan afectado los servicios, negamos que alteremos la paz social. Sí aceptamos la instancia a los efectos que se retrotraigan todas las medidas al 28 de marzo, cuando nosotros denunciamos ante el Ministerio el inicio nuevamente del estado de alerta, movilización y asamblea permanente por los incumplimientos del Ejecutivo. Además estamos pidiendo un nuevo acuerdo salarial, porque cambiaron las condiciones que había en enero, porque ellos no pusieron el 10% a abril y no están dispuestos a poner el 8% a julio. El día jueves, cuando estuvo el Ministro de Trabajo, se ofreció a interceder ante ambas partes para que se resolviera este conflicto”.
Agregó Rubén Allende, al referirse a lo que los trabajadores consideran incumplimientos del Ejecutivo del acuerdo firmado oportunamente, que “en cifras económicas nos pagó casi un 1% menos en abril, un 2% menos en julio. En vez de un 28% nos iba a quedar un 25 %, pero independientemente de ello se trata de que firmó algo que no está cumpliendo. Por el otro lado, con el tarifazo que está recibiendo toda la población, no nos preguntan si nos alcanza o no, directamente nos mandan un 400% de aumento en todas las tarifas, como aumenta el costo de vida, como la inflación en curso. Por eso amerita el pedir la reapertura de paritarias, porque los acuerdos arribados no alcanzan ni para llegar al primer trimestre. Esta es la situación que está viviendo todo el movimiento obrero, a lo que se suma, para nosotros, incumplimiento del Ejecutivo”.