Nicolás Garzón, el último joven que permanecía internado tras la fiesta electrónica Time Warp, fue dado de alta del Hospital Británico. Según informaron de la propia institución, "egresa del hospital con su cuadro clínico, respiratorio, hepático, pancreático y renal normalizado".
El chico de 24 años había sido internado el 16 de abril, luego de rave, en el Hospital Argerich, pero dos días después fue derivado al Británico por pedido de sus padres.
Los otros tres jóvenes que estaban internados en el Hospital Fernández fueron dados de alta hace dos días, tras haber permanecido más de dos semanas en terapia intensiva.
En un comunicado, el hospital precisó que Leandro Espinoza, de 19 años, Nicolás Laitán, de 23, y Micaela Polivoy, de 20, se encuentran "estables y con muy buena evolución, por lo que se les dio el alta médica de la Unidad de Terapia Intensiva, siendo derivados a un centro de rehabilitación muscular".
El legislador porteño del Frente de Izquierda Patricio del Corro presentó una denuncia penal contra el jefe de Gobierno de la Ciudad por presunto "incumplimiento de los deberes de funcionario público".
Según informó Del Corro, la denuncia presentada ante el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 7 incluye también al director de la Agencia Gubernamental de Control, Matías Álvarez Dorrego, bajo la acusación de "negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas e incumplimiento de los deberes de funcionario".
El legislador señaló que cuando fue a brindar explicaciones ante la Legislatura, Álvarez Dorrego "mintió alevosamente en cuanto a la cantidad de personas que estaban en la fiesta, la venta de entradas, la habilitación, las condiciones de hacinamiento y la falta de agua".
El diputado justificó la denuncia: "El jefe de Gobierno, que estuvo de viaje por Estados Unidos la primera semana luego de las cinco muertes, al regresar al país sólo atinó a responsabilizar a los jóvenes y a sus padres, y a avalar el informe que dio en la Legislatura Álvarez Dorrego".
"Aun cuando en la investigación judicial constan todas las irregularidades de público conocimiento, Rodríguez Larreta siguió ratificando lo actuado por el funcionario y sosteniéndolo en el cargo. Se cubren entre ellos", sostuvo Del Corro.
"Esto se repite en otras tragedias, como los derrumbes del boliche Beara o del gimnasio en Villa Urquiza (2010). La semana pasada ya había pedido la interpelación de Larreta en la
Legislatura, pero el PRO y sus socios de Cambiemos se negaron", concluyó Del Corro.
Fuente: Infobae.