El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio desde la Casa Blanca un fuerte impulso personal a la candidatura de Chicago para los Juegos Olímpicos de 2016, al afirmar que todo el país quiere ese desafío para el que la ciudad en la que vivió la mitad de su vida está "preparada".
"Chicago está lista. El pueblo estadounidense está listo. Queremos esos Juegos. Los queremos", proclamó Obama durante un evento especial organizado en la Casa Blanca para promover la candidatura estadounidense de cara a la decisión que se tomará el 2 de octubre en Copenhague.
"Estados Unidos está deseoso de recibir al mundo. Este país se sentiría honrado de albergar los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2016 y de servir como anfitrión a los miles de atletas y millones de visitantes de todo el mundo", aseguró el presidente.