Hace muchos años que Margarita está jubilada de la actividad docente.
Pero ha seguido contribuyendo en forma positiva, poniendo su casa, su tiempo, su esfuerzo para mantener la actividad gremial a través del Centro de Educadores Suarenses, organismo que el 8 de agosto pasado cumplió 50 años de creación en nuestro medio.
“Al principio yo no tomaba muy en cuenta lo que nos pedían las docentes que llevaban adelante una delegación de la FEB en Coronel Suárez. Pero después, con los años, hacia 1980, me fui acercando y tomando conciencia de lo que implicaba estar en el gremio, ayudar a los compañeros docentes con los trámites que tenían que hacer y convencer a todos de que el sueldo de los maestros hay que defenderlo”.
Con la convicción que le es propia Margarita expresó que “porque es bien cierto el refrán que dice “más hambre que maestro de escuela”, ya que en algún tiempo las autoridades tenían muy mal pagos a los docentes y muchas veces no les alcanzaba ni para comer”.
“Hemos tenido momentos difíciles donde se llevaron a cabo paros interminables en reclamo de mejores salarios, donde nos descontaron todo el sueldo, aunque después, y como parte de la negociación, nos devolvían lo que nos habían quitado”, recuerda Margarita.
“Afortunadamente las nuevas generaciones tienen una mayor conciencia gremial y vienen con la fuerza y la creatividad de la sangre joven y nos ayudan a hacer crecer esta entidad”.