Pese a los intentos de la comunidad de Pedro Luro para evitar el traslado, pasadas las 10 de la mañana los familiares del Beato se llevaron sus restos a la colonia San Ignacio, en Neuquén.
“Muchas personas comenzaron a llegar desde ayer. Es conmovedor ver tantas caras compungidas”, relató en Frente a Cano José Luis Onorato, integrante de la comunidad ceferiniana.
Asimismo, indicó que en los últimos días algunos fieles molestos por la decisión de las autoridades eclesiásticas del traslado de los restos, le manifestaron su malestar al padre Vicente Tirabasso. “No fue decisión de él, fueron los familiares de Ceferino los que hicieron el pedido, lo avalaron los obispos y después el Vaticano dio las indicaciones finales”, señaló.
Finalmente, se refirió al futuro de Fortín Mercedes y Pedro Luro, sin los restos de Namuncurá en el santuario, y estimó que la gente de distintos puntos del país seguirá acercándose porque “Fortín se destacó por ser un centro de meditación, paz, tranquilidad y oración”.
Fuente: www.frenteacano.com.ar