Superó las mejores expectativas. Ni en sueños los organizadores de la Strudel Fest, las instituciones y comercios de Pueblo Santa María, se imaginaron una adhesión tan grande de público, todos ávidos de poder disfrutar de la gastronomía alemana, de pasear, encontrarse y disfrutar de la música y de la propuesta en general de esta primera Fiesta del Strudel.
El día martes de esta semana la Comisión organizadora llevó a cabo una reunión de evaluación.
Por supuesto que se anotaron muy bien aciertos y errores de esta primera realización. Para reforzar los aciertos el año que viene, y para corregir los errores en la próxima edición.
Como todo el mundo sabe, para el mediodía no quedaban ni miguitas de los diferentes tipos de strudel en ningún stand. Se reforzó entonces la cocción de los kreppels que se amasan rápido, se debe dejar levar un momento, se fríen y se sirven calentitos. Pero era tanta la demanda que la gente no permitía ni un ratito de descanso a la masa para que levante y hacía colas en los diferentes stands esperando que la masa se friera, se cubriera con azúcar y se despachara en las bolsas de papel que ayudan a absorber el exceso de grasa.
Consultada Patricia Maier, quien fue la que tuvo la idea inicial y ayudó a que prendiera la iniciativa en muchas personas de buena voluntad que quieren que Santa María tenga una fiesta que la identifique y que conquiste la llegada de visitantes, como pueblo turístico de la Provincia, dijo que “fue en abril del año pasado cuando comenzamos con esta idea desde nuestra institución, convocamos al resto de las entidades de la Colonia y comenzamos a soñar un poquito en lo que pensábamos que iba a ser esta fiesta. Para nosotros resultó un éxito. Nos desbordó totalmente. Tenemos que asumir los errores y pedir las disculpas del caso, porque no pudimos cubrir las expectativas en cuanto a lo que era la oferta de gastronomía alemana. Ni en los mejores cálculos podíamos pensar en que nos visitara tanta gente. Yo no lo podía creer cuando eran las 11:30, 12 del mediodía y cada uno de los stands ya no tenía nada para ofrecer. No es fácil resolverlo en ese momento. Los kreppels se pueden hacer en el momento, no así el strudel, que lleva su tiempo, no es que podíamos empezar a elaborar otra vez más de lo que teníamos previsto”.
Patricia Maier agradeció a todos los que colaboraron, a las instituciones, a la gente en general y también a los músicos que de manera desinteresada se sumaron a la propuesta y colaboraron para ponerle alegría a esta fiesta.
Por supuesto que ya se está programando la edición del año próximo, con el convencimiento que si se sigue trabajando bien esta será la fiesta que distinguirá a Santa María.