“Gracias por la oportunidad de poder presentar nuestro trabajo. Es muy importante para el artista descontextualizar la obra. Quiero decir, que la obra esté fuera de los lugares comunes, como son las galerías y los museos, en donde cierto público tiene acceso. El arte tiene que ser accesible a todos, y principalmente, creo yo, a los más chiquitos. Educar en el arte es una tarea que tenemos los profesores de arte muy importante. Que los chicos crezcan conviviendo con el arte. Ahora se lo puede encontrar en una pizzería, en el Instituto Radiológico, en el Hospital. Yo creo que eso es importantísimo para acercarnos a todos. Estoy sumamente agradecida de esta oportunidad. Prestigia nuestra obra estar en el Palacio Municipal”.
Con estas palabras, plagadas de humildad, comenzó su intervención en la conferencia de prensa, en la mañana del viernes, Guillermina Victoria.
Los sitios web dedicados al arte dan cuenta en parte de la trayectoria de esta artista plástica suarense, que ha trascendido no solo las fronteras del Distrito, sino también del país.
En uno de esos sitios puede leerse la siguiente crítica, que describe su obra:
Guillermina Victoria, manos y brazos, que tejen y construyen momentos
La pintora argentina Guillermina Victoria profundiza en el dibujo, en la precisión del trazo, mostrando manos, brazos, antebrazos, exhibiendo más manos que, delicada pero con la seguridad de quien sabe aguantar, se mantienen firmes, buscan hilvanar, construir, re Guillermina Victoria, manos y brazos, que tejen y construyen momentos
La pintora argentina Guillermina Victoria profundiza en el dibujo, en la precisión del trazo, mostrando manos, brazos, antebrazos, exhibiendo más manos que, delicada pero con la seguridad de quien sabe aguantar, se mantienen firmes, buscan hilvanar, construir, remendar, unir aquellos puentes emocionales, situaciones de psicología delicada, momentos que fluyen en línea con la elaboración de un mundo situado ente el sueño, el subconsciente, la evidencia surreal y los recuerdos de una realidad que se materializa o que se diluye con delicada determinación.
Por otra parte se interesa por la figura de la mujer, en muchas ocasiones mostrándola desnuda, como icono de lo que quiere representar, más allá de lo que es, como motor, actriz de sí misma, punto de enfoque de situaciones en el sentido de estar conectada a un plano de la realidad que, partiendo de lo material se emociona y transgrede a través de los sentidos”.
Realizando un recorrido por los proyectos de este año, relató a los medios locales que “estoy trabajando mucho. En Inglaterra junto con Ana Inés Salvi, quien trabaja allá, estoy ilustrando las ediciones de una asociación internacional de maestros del lenguaje que tiene sede en Cambridge. Para ellos hice un libro e ilustro un libro que sale casa seis meses. En Estados Unidos estoy ilustrando el libro de un ex residente de Coronel Suárez que se llama Fernando Leonhardt; hice la portada de su libro que se va a llamar Mi mano izquierda. En Colombia ilustré el prefacio de un libro de una socióloga, que habla de los conflictos de la docencia de la educación en la actualidad. El prefacio está escrito por el Dr. Alberto Bialakowsky que es un sociólogo argentino. En México, en abril, presento una obra en la inauguración de una galería nueva, Eje, curada por un italiano, Maximiliano Grego, va a ser mi primera obra expuesta en ese país. También en México trabajo con Cátedra Unesco; mi jefe se llama Eduardo Sandoval Forero, él es el Director de Cátedra Unesco y junto con él ilustro todas las publicaciones de la Universidad autónoma Indígena de México y las de Cátedra, todas tienen relación con la interculturalidad, la democracia y la construcción de la paz a través de la educación. En Chile ilustré el libro de ex presidentes, de la Asociación Latinoamericana de Sociología. Convocamos a la fotógrafa Sofía Trobbiani, de Coronel Suárez, para que hiciera la tapa y yo ilustré los interiores con varias obras que fueron un homenaje a los desaparecidos por Ayotzinapa. Todo este libro fue escrito por los ex presidentes de ALAS, en un contexto muy polémico de denuncia social y de pedido de justicia. En Brasil está a punto de presentarse un libro para el cual ilustré la portada, de la profesora Edianne Nobre, (Doctora en Historia, Profesora de la Universidad Regional de Cariri, Brasil) que trabajó casi un año en el Vaticano. Ella tuvo acceso a documentación privada y sobre todo ese relevamiento que hizo edita un libro del que tengo la suerte de hacer la tapa. En Buenos Aires estamos terminando un libro con el Dr. Alberto Bialakowky con quien trabajo desde hace muchos años, es ex presidente de la Asociación Latinoamericana de Sociología; construimos lo que nosotros llamamos Interobra: yo lo envío una obra y él me devuelve un poema. En retribución a todo este trabajo que hacemos juntos ellos editan un trabajo de 80 páginas, con mi obra y su poesía. Es algo muy sentido que hemos hecho, con muchísima ilusión y muchísimas ganas. En Buenos Aires también estoy ilustrando un libro que trata sobre el Alzheimer, es una hija que cuida a su mamá y está escribiendo toda esa experiencia durísima que las atraviesa. Yo estoy tratando de interpretar esa experiencia y plasmarla en imágenes. Aquí en Suárez comienzo un taller de dibujo en el taller de Verónica Kenig, que muy gentilmente me cedió su espacio, y también tengo un proyecto con el escritor Julio César Melchior, que vamos a trabajar específicamente con la mujer alemana, desde sus costumbres, su cotidianeidad. Todos los relatos que él hizo, les vamos a incorporar a las imágenes como para completar la historia de nuestras colonias. Soy descendiente de alemanes, viví de chica junto a mi abuela, toda la tradición, es algo muy arraigado y desde hace mucho tiempo tenía ganas de plasmarlo en imágenes. El 8 de marzo presentamos Habitantes, que fue todo un trabajo de tres años anteriores con Josi De Lusarreta y Patricio Calut, un homenaje a la mujer y el poder de resiliencia”.
Agregó la artista, sintetizando tan prolífica obra fuera del ámbito habitual de las galerías, que “trabajamos con interculturalidad, democracia, educación y la construcción de la paz. Ese es nuestro trabajo. Trabajamos todos ad-honorem, las publicaciones las editan universidades y tienen alcance gratuito, tanto impreso como digital, y se distribuyen siempre en escuelas, facultades, bibliotecas. Para mí es un desafío muy grande, una emoción; porque interpretar esos textos, que a veces nos son bastante ajenos por un nivel muy elevado de investigación, que me requiere mucho tiempo de estudio. Pero resulta, porque mi imagen es una figuración, un realismo mágico. Las imágenes son sensibles y creo que tienen siempre un gran poder de interpretación, se adaptan siempre a los textos porque se pueden encontrar un nexo. Yo trabajo con la gestualidad del cuerpo humano y siempre va a ser inherente a los temas que nos atraviesan”.