A las 3 de la mañana, en su sitio de Facebook, la familia del joven de 26 años, con Síndrome de Proteus, anunció su fallecimiento con este mensaje:
“La flia. de Cuchi queremos contarles que lamentamos en lo mas profundo nuestro que Kuchi se ha ido a la casa de Dios. Falleció esta noche de un paro cardiorrespiratorio en el Hospital Central de San Isidro. Gracias por ser parte de su vida y de haber entrado en un corazón!
Lo vamos a extrañar”.
A partir de ese momento el sitio se llenó de mensajes de dolor y de condolencias para su familia, pero dejando entrever todo el afecto y la admiración del que Christian, conocido como Kuchi, se había ganado a lo largo de su intensa vida.
Tristeza, fue una de las palabras repetidamente empleadas, pero también agradecimiento por lo que dejó en cada momento, en cada acción solidaria y de ejemplo de vida. Infinidad de palabras cariñosas para despedir a quien es calificado como un verdadero guerrero de la vida.
Aquí están algunos de esos mensajes aparecidos en la red social y en el sitio a través del cual se comunicaba con sus amigos y conocidos.
“Tristeza.... Te fuiste kuchi pero dejaste todo en esta lucha... Admiración pura x vos... Estas lagrimas son de bronca de no haberte podido quedar un rato mas para seguir enseñándonos que nunca hay que bajar los brazos”.
“Siempre estarás presente en nuestro pecho vieja. Como te has hecho querer”.
“Me inspiraste como pocas personas antes en mi vida y me diste y me seguís dando mucha fuerza y energía para continuar con mi compromiso por la paz. Te pido que por favor nos sigas acompañando con tu intercesión ante el Padre! Gracias por todo!”.
“Se fue un groso de la lucha y la superación. Que descanses en paz guerrero!!”
“Es un día de mierda para muchísimas personas, porque muchísimas personas te quieren, pero muy seguro estoy de que vos no querés que nadie esté mal. Hasta pronto Ku y descansa en paz GUERRERO!”.
“Sos un gran ejemplo de vida para todos.
Ver cm luchabas día a día y t tomabas la vida, es un ejempl para muchs q ns hacems problema x cualquier cosa y vs cn tu enfermedad y todo vivías la vida cm nadie....”
“Tus ganas de vivir, siempre ayudar con tu palabra y el ejemplo, nunca aflojar y una sonrisa...
Que lindo haberte conocido! Sos y serás único !!!
Buen viaje y hasta pronto kuchi!!”.
“GRACIAS por tanta vida hermano!
y espéranos, porque cuando lleguemos arriba seguro nos tengas que enseñar mucho más”.
Kuchi, como lo llamaban sus allegados, sufría de un desorden desproporcionado en distintas partes del cuerpo, incluidos órganos y huesos, producto del Síndrome de Proteus, enfermedad que produce fuertes alteraciones en la cadena de ADN.
Conocida también como “enfermedad del hombre elefante”, al comienzo era confundida con otras cuatro patologías. En el 2011 se descubrió la proteína que causa el síndrome, se llama AKT-1. Sólo se han confirmado poco más de 200 casos en todo el mundo, y el suyo era el único caso en Argentina.
Trabajaba en Cáritas Argentina, de profesión periodista, conducía un programa, “Kuchi sin filtro”, en una radio de San Isidro; integraba la Comisión Directiva de Racing Integrado, del Club Racing de Avellaneda. Era un incansable luchador en temas de discapacidad y de promover acciones solidarias entre sus allegados, cuando detectaba una necesidad.
El año pasado llegó a Coronel Suárez invitado por un grupo de jóvenes que lo conocieron en Pascua Joven, para brindar una charla. Un Concejo Deliberante desbordante de público, sobre todo jóvenes y adolescentes, escucharon atentamente lo que tenía para decir: de no al aborto, sí a la vida a pesar de todo, amor al prójimo y amor a Dios.
Fue la primera vez de un total de por lo menos cinco visitas a la ciudad: para brindar otra charla pública, para visitar el Centro Comunitario Espíritu Santo, para ser público especialísimo en un partido de rugby, disciplina de la que había sido jugador desde niño y hasta que su enfermedad se lo permitió.
Había manifestado en muchas oportunidades que soñaba con poder vivir en Coronel Suárez, cuestión bastante difícil porque su médico de cabecera y los centros de complejidad para poder atender las manifestaciones del síndrome que padecía estaban en Buenos Aires.
Uno de los jóvenes con el que trabó una fuerte amistad, quien motorizó su primera llegada a Coronel Suárez y lo alojó en su casa, fue Facundo Fernández.
El lunes por la mañana La Nueva Radio Suárez habló con Facundo, quien con el dolor del momento tuvo la claridad para expresar lo valioso del ejemplo de celebración de la vida que dejó Christian.
“Lo que más me impactó de Kuchi es la fuerza que siempre demostró para enfrentar la vida y los problemas que tenía. Cuando lo conocí en Pascua Joven a mí me impactó mucho la fuerza de voluntad que tenía él y quería que todos lo conocieran, así le propuse que viniera a darnos una charla. Nunca lo vi afligido, siempre estaba contento, con ganas de todo. Su salud empeoraba todos los días. Él decía que por la enfermedad que tenía había aguantado bastante. Anoche (por el domingo) me enteré que estaba internado, entonces me comuniqué con el hermano, quien me dijo que estaba grave, que le estaban haciendo una transfusión de sangre y hoy (por el lunes) me enteré que había fallecido”.
Facundo Fernández habló de todo lo que Christian Fritz le enseñó en este año de amistad que compartieron: “que hay que enfrentar la vida, a pesar de los problemas que se tengan, y disfrutar al máximo todo porque uno no sabe cuándo le va a llegar la hora. Transmitía mucha fe y mucho amor a Dios”.