Siempre se ha hablado sobre la necesidad de mantener en condiciones las vías de comunicación que facilitan el escurrimiento de las aguas en caso de intensas precipitaciones en la ciudad sobre todo teniendo en cuenta el estado de inestabilidad climática que se registra en estos tiempos en nuestra región.
Una recorrida por el canal de la Avenida Alfonsina Storni desde el predio de la Sociedad Rural en dirección a las cinco esquinas el panorama es bastante complicado, porque al agua estancada que no puede escurrir a raíz de suciedad de todo tipo, como pastos, ramas, algunos desechos propios de los residuos domiciliarios que “siempre aparecen” sumado ahora a las ultimas lluvias y las temperaturas elevadas y el porcentajes de humedad elevado hasta puede advertirse el crecimiento de plantas.
Todo eso y lo que se imagine ante la falta de limpieza de los canales de desagüe se torna prácticamente en un virtual taponamiento que impide el normal escurrimiento de las aguas hacia el nivel natural y en caso de una nueva abundante lluvia con milimetrajes superiores la complicación puede ser grave en sectores urbanos con desbordes inesperados.
Independientemente de esta realidad, aparecen alimañas, insectos, moscas y otras especies nada recomendables en un momento donde el alerta es prevenir estas situaciones, es necesario planificar un desmalezamiento y un repaso general de los canales, ya que lo propio ocurre en el canal de la calle Olavarria frente a la fábrica en dirección a Logia Lautaro frente al Barrio Islas Malvinas, en el mismo barrio el que corre paralelo a la avenida Isla Gran Malvina desde Olavarria hasta Pueblo Santa Trinidad, el de la avenida 12 de Octubre desde el Puente hacia el Polo Club, el canal de las cinco esquinas, punto donde convergen las aguas de lluvia de la ciudad y su confluencia con el canal que corre paralelo y por detrás del aeroclub hasta desembocar en el arroyo Sauce Corto.