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Se inicia una semana con renovados bríos en la Municipalidad.
Se trata de recomponer toda la situación derivada del conflicto municipal.
El Intendente Palacio convoca a su Gabinete para trazar líneas de acción y ordenar todas las áreas para cumplir con los servicios públicos.
Ayer sábado la recolección de residuos reinició su labor y se encontraba en plena organización la planificación del servicio de riego, reiteradamente requerido por la población.

El sábado nuevamente los camiones municipales comenzaron a cumplir con los distintos radios en que se encuentra dividido el servicio de recolección de residuos en la ciudad, Pueblos Alemanes y en la localidad de Huanguelén respectivamente.
La tarea no es fácil de desarrollar, sobre todo cuando hubo que verificar el estado y funcionamiento de los camiones y de la maquinaria abocada al servicio, ya que la acumulación de basura ha sido una de las principales preocupaciones de las últimas semanas.
A pesar de los contenedores que se ubicaron en la ciudad, y que fueron rotando de barrio, de la buena voluntad de los funcionarios de Servicios Públicos y de los propios vecinos no fue suficiente para que se advirtiera la presencia de montículos de basura en esquinas, espacios públicos y frente a domicilios y en lugares inapropiados para ello.
El viernes se anunció el acuerdo, la Asamblea de trabajadores aceptó la propuesta y se ordenó que inmediatamente se organizara todo el operativo parta comenzar a limpiar la ciudad, donde no solamente deberán levantarse los residuos domiciliarios, ordenarse el basural municipal y comenzar a cortar el pasto, sino también dejar en condiciones las rotondas, plazoletas y hasta el sistema ornamental de la Navidad, que todavía permanece en la portada de la Municipalidad, las campanitas sobre la Avenida Alsina y el centro y un arbolito frente a la sede de Internación del Hospital.
Son detalles y algo mas, que formaban parte de la organización y de la puesta a punto de todo el aparato municipal, básicamente en lo referido al cumplimiento de los servicios públicos, ya que también, como dijo el Intendente Palacio, desde la Secretaria de Hacienda se montó una batería de números y cálculos para afrontar la emergencia y apreciar la disponibilidad económica con la que se cuenta para un elemento que es vital, la compra de combustibles, lubricantes, repuestos y cumplir con proveedores, cuyas cuentas se encuentran retrasadas.
Se inicia la semana y es de esperar que sea mucho más tranquila, que permita ordenar y planificar, mientras los funcionarios correspondientes recibirán las instrucciones del Intendente para elaborar el presupuesto de la Municipalidad para el presente ejercicio 2016.
De lo que venia y recibido como herencia, también hoy la ciudad presenta su pavimento deteriorado por todos lados y con los servicios sanitarios deficitarios, que derraman litros y litros de agua a la vía publica con sucesivas roturas.
Es de esperar que lleguen aires renovadores, un respiro en definitiva que le permita al nuevo gobierno municipal avanzar en su plan de acción.

 
 
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