Es la colonia de vacaciones más numerosa de todo el programa Escuelas Abiertas en Verano. Alrededor de 130 chicos concurren todos los días a disfrutar de las actividades que les proponen los profesores a esta sede que funciona en el Centro Comunitario Espíritu Santo.
Cinco piletas de lona, dos grandes y tres más pequeñas, para la realización de las actividades acuáticas y mucha dedicación de todos para que los niños estén contenidos y que la pasen bien, disfrutando de vacaciones cuidadas y seguras.
Consultada Norma Gaab, a cargo del Centro, comentó que la colonia “funciona a la mañana y a la tarde, hoy concurren 136 chicos. Siempre han asistido muchos chicos a esta actividad y como es abierta para todos los chicos de nuestra Colonia las mamás están seguras y traen todas a sus chiquitos para que la pasen bien”.
Funciona en dos turnos a la mañana y a la tarde y hay muchos que repiten la concurrencia en ambos turnos.
“Ingresan a las 9 de la mañana, desayunan a las 10 hs. y a la tarde les servimos la merienda, en este caso en distintos grupos, porque se juntan en este horario muchos chicos. A la mañana tienen 3 profesores y un guardavida y está la Directora Natalie Resch, y a la tarde tienen 6 profesores, un guardavida y también la Directora de la propuesta. Cada vez a los chicos les gusta más esta propuesta, todos vienen muy contentos y los padres están muy agradecidos que tienen este lugar, donde pueden venir todas esas horas y pasarla bien. Les enseñan a nadar, a jugar y a compartir un momento entre chicos de su edad”.
¿Qué diría el Padre Carlos Amuchástegui, creador del Centro Comunitario, si viera toda esta concurrencia?
“Siempre nos decimos lo mismo. Ahora estamos preparando otro viaje para Rafael Calzada”, dice Norma Gaab, y agrega que “él siempre soñó esto y creo que ahora estamos cumpliendo lo que más podemos. La Comisión es una Comisión chiquita, también colabora un montón mucha gente, porque hay que darle la merienda todos los días a los chicos, por lo que tenemos que pensar en la cocoa, la leche, el azúcar y las tortas. Todos están colaborando. No tengo palabras de agradecimiento para las panaderías de Coronel Suárez, a las chicas mismas que trabajan acá en la Cooperativa, que hacen las tortas para los chicos, porque también nos ayudan en esto. Todos los años nosotros contábamos desde la Municipalidad con un chico que tenían de mañana, con planes de trabajo, y una chica de tarde. Este año no tenemos eso. Esas personas nos filtraban las piletas, le pasaban el barrefondo dos veces por día, para tener el agua en condiciones para las actividades de cada día. Al no contar con esas personas todo ese trabajo lo estoy haciendo yo con otra chica que me ayuda también de la Cooperativa, además de limpiar los baños y lavar las tasas de los dos turnos. Tenemos que además cambiar el agua de las piletas y limpiarlas, porque los chicos se merecen tener el agua limpia y estar bien. Lamentamos no contar con ese apoyo este año”.