En relación a cómo se encontraban los productores de miel Javier Roth dijo que “estamos con mucho optimismo. Ya se empezó a sacar miel en la zona de Villarino, La Pampa, sur de Puan, que son lugares a los que se llevan bastantes colmenas, y ahí realmente la cosecha anduvo muy, muy bien. En general anduvo en rendimiento, entre 40 y 50 kilos por colmena, que hacía años que en esa zona no teníamos semejante cosecha”.
El Ingeniero Roth destacó que la actividad “se ha convertido en general bastante migratoria, donde los apicultores que hacen de la actividad una forma de vida migran hasta el sector de La Pampa, sur de Villarino, de Puan e incluso un poco más abajo, como es llegar hasta Viedma y Patagones; para todos estos productores la cosecha ha andado muy bien. Para los que no migran las colmenas, que generalmente están en el Distrito de Coronel Suárez y en los Partidos vecinos, la cosecha está arrancando recién ahora, un poco más atrasada, pero con buenas perspectivas. Se está empezando a sacar en casi todos los lugares, y se está haciendo con buena cantidad de miel. De no mediar ningún hecho fortuito, de acompañar las temperaturas y las precipitaciones como lo vienen haciendo, estamos frente a una cosecha, posiblemente, muy buena. Lógicamente que no son las cosechas de muchísimos años atrás: antes una buena cosecha era de 90 a 100 kilos por colmena, hoy una buena cosecha es entre 35 y 45 kilos por colmena”.
¿Por qué esa diferencia, que se remonta a 10, 15 años atrás?
Explicó Javier Roth que “fundamentalmente esto es así porque hoy se trabaja mucho con agroquímicos, debido al auge de la siembra directa, donde el 90% de la superficie está bajo esta forma de cultivo. Esto lleva a un control de malezas importantes a través de agroquímicos. En los últimos años también se incrementó mucho la ganadería, por lo que las pasturas no llegan a florecer; además las pasturas se controlan muy bien con agroquímicos. Antes había esos enormes cardales donde los productores hacían piquetes para que la hacienda pueda ir a comer. En este ultimo tiempo la baja del girasol a expensas de la siembra de soja, por una cuestión de mercado y rentabilidad, sumado a años que han venido secos, no es el caso de estos dos últimos años, todo eso sumado hizo que costara mantener la rentabilidad de la apicultura con cosechas magras de 15 y 20 kilos. Gracias a Dios ya el año pasado se revirtió esto, acompañó muy bien el clima y tuvimos una buena cosecha”.
Por supuesto que en este análisis no pueden faltar los cambios económicos de los últimos días del año, con las nuevas medidas que tomó el gobierno: “la quita de retenciones al girasol afectó de buena manera. Esta es una zona girasolera, el girasol es una planta muy melífera, por lo que seguramente se va a hacer muchísimo más girasol y menos soja. Esto para el futuro trae optimismo para el productor apícola”.
Sobre la comercialización de miel, a la fecha, indicó que “está un poco lenta. Tengamos en cuenta que aquí se suman factores en contra, al revés de lo que pasa en cuanto a la producción. Estados Unidos es el principal productor y también el principal comprador de miel del mundo; es el que más produce y el que más consume. Este año tuvieron una muy buena cosecha, eso hace que va a importar menos miel, no tiene tanta necesidad urgente de comprar este producto. Por otro lado, Argentina junto con China son los principales formadores de precios, porque son los principales productores de miel, esto hace que haya una mayor oferta y una menor demanda, China también tuvo una muy buena cosecha, y esto hace que el precio viene a la baja. Como también hay que agregar que el año pasado, cuando hubo una buena cosecha, quedó miel sin vender, por lo que aumenta más la oferta y esto va en contra del precio. Hoy a todos los exportadores les está costando vender la miel. El precio ha ido bajando; estamos en un 30% en dólares con respecto al año pasado, es decir, hoy el productor apícola está cobrando menos por kilo de miel en pesos que antes de la devaluación, hemos perdido un 30% el valor en dólares. Hoy el valor está entre 20 y 22 pesos. Esperemos que este sea el piso, que no siga bajando. Todos los productores que pueden están reteniendo la miel, están vendiendo lo estrictamente necesario para el desenvolvimiento, esperando que esto cambie, porque es una cuestión de oferta y demanda. Están conjugándose todos los factores para que vaya a la baja. Cuando el productor necesite vender menos ojalá que esto haga que el precio busque un piso y que en el invierno se recupere parte de lo perdido”.