Otra jornada donde los bombos, el diálogo sin resultado, la inactividad dentro de la Municipalidad de Coronel Suárez siguió estando vigente. Pero más que el martes, miércoles y jueves, los ánimos el día viernes parecieron recalentarse.
La mañana comenzó con la presencia del Intendente Roberto Palacio en el Corralón Municipal, pidiendo hablarle a los trabajadores en la asamblea que estaba teniendo lugar desde antes de las 8 de la mañana.
Esto, que fue una apuesta sobre todo de predisposición al diálogo por parte de la máxima autoridad del Distrito, no dio el resultado esperado. Las asambleas siguieron en diferentes sectores de la Comuna.
Cuando terminó la que se desarrollaba en el Hospital Municipal, los trabajadores marcharon hacia la sede central de asiento de las autoridades, sobre la Avenida Alsina. Lo hicieron al sonar de los instrumentos de percusión y portando una gran bandera argentina.
Como sucediera antes de que finalizara el año 2015, otra vez la bandera volvió a desplegarse cruzando la Avenida Alsina en sus dos manos de circulación. Y en un improvisado acampe que es espera, aguardando respuesta de las autoridades a sus reclamos, volvieron a ocupar el hall de ingreso y otros sectores de la Municipalidad.
Cuando la mañana avanzaba, se conoció que a las 11 horas el Jefe Comunal convocaba en el salón de usos múltiples a una conferencia de prensa.
A su vez, la representación del Sindicato, sabiendo que los medios iban a transmitir en directo la mencionada conferencia, por lo que podían escucharla, anunció que al término de esa conferencia iban a desarrollar también un encuentro con los medios de la ciudad en el hall del Palacio.
Apenas unos momentos antes, quien fuera candidato a Concejal, y una figura de renombre en la ciudad, Raúl Caccavo, intentó hablar con los trabajadores reunidos en el hall. No le fue posible. Este asunto no se arregla con palabras y pidiendo buena voluntad.
Para el Intendente Municipal todos las cuestiones que reclama el Sindicato y los trabajadores están ya tratados y acordados: la reincorporación de las personas a quienes no se les renovó el contrato, los $2.000 de bono de fin de año que se va a pagar en este mes de enero, tal lo establecido en un acuerdo firmado hacia fin de este año y está concretado el pago del sueldo y medio aguinaldo en tiempo y forma.
La solicitud del gremio que no se puede responder es establecer una pauta salarial cuando todavía no está modificado el presupuesto 2016. Pide que recuerden que debe gobernar para 40 mil suarenses y que no le quiten gobernabilidad en el principio de su gestión.
Para el gremio los nuevos contratos que se propone al personal que fueron dejados sin trabajo son contratos precarios, que se contraponen en su espíritu a lo que dispone la nueva ley 14656, alegan que la nueva administración desconoce esta ley, que se haga efectivo el pago de los $2.000 de bonificación y exigen que se comprometa a una pauta salarial, aún cuando no está la redacción definitiva del presupuesto para este año.
Desconfían del Intendente, que primero dijo que no firmó ningún cese de contrato y que luego reconoció que había firmado cuatro de estas notificaciones.
Por supuesto que hay diálogo, porque nunca estuvo cortada la conversación entre las partes. Pero el diálogo tiene efectos positivos cuando hay algún tipo de acuerdo. Y por ahora hay ausencia de acuerdos. Y la evidencia está en que el viernes fue de todas la jornada más caliente en el ámbito municipal.
Como el juego de niños, conocido como teléfono roto, da la impresión que el diálogo que por ahora se está dando en este conflicto es entre sordos.