Este 10 de diciembre habrá de concluir su mandato como Concejal y desde hace dos años como Presidenta del Concejo Deliberante.
Para quienes pensaron que por hecho de ser mujer, y vivir en la localidad de Huanguelén, iba a cumplir una función endeble como Presidente se equivocaron.
Estuvo todos los días en el Concejo, y también los fines de semana o fechas especiales que ameritaban la representación del Cuerpo en actos oficiales. Además cumplió con férrea dedicación el objetivo de impulsar el trabajo de los Concejales cuánto pudo, intentó firmemente establecer un camino de diálogo con el Departamento Ejecutivo. Marcó una impronta especialmente institucional al Cuerpo Deliberativo suarense.
Al principio de la entrevista realizó una cómica descripción de la tarea del Concejo: “finalizo mi segundo mandato, estuve ocho años en el Concejo Deliberante y me parece tiempo suficiente como para decir que me retiro. No sé si he marcado algo en el Concejo. Siempre mi intención fue darle al Concejo Deliberante el rol que le corresponde como Cuerpo Deliberativo. Y creo que en estos dos años el Concejo Deliberante se ha puesto los pantalones largos. Está bien que no tiene el cinturón prendido… tendrá los bolsillos afuera, estará mal puesto el pantalón, pero está puesto! A mí lo que me gustaría que de ahora en más el Concejo Deliberante tenga el protagonismo que tiene que tener. Ahí está representado el pueblo. Yo creo que la gente pierde de vista este poder tan importante que es legislativo. Es muy incipiente la democracia argentina y con estos gobiernos, de intendentes de tantos años, como Moccero, la verdad que no es bueno para la democracia. Aún habiendo sido una administración excelente, regular o mala, no importa, pero la alternancia me parece fundamental porque enriquece al sistema”.
Destacó que “nadie es imprescindible, siempre hay alguien que tiene una idea mejor, tenemos que aprender a escuchar, a trabajar entre todos y a llevar adelante la mejor opción, porque detrás nuestro hay miles de personas que pusieron su confianza en nosotros”.
Analizó que “creo que podríamos haber hecho muchísimo más desde el Concejo Deliberante. Traccionar más, marcar más la cancha, pero en el buen sentido. Marcarle al Ejecutivo qué es lo que se necesita. Dieciséis personas de diferente origen, diferente vida, diferente ocupación… Es muy rico el legislativo por esa razón. Creo que debe haber un mayor compromiso de los Concejales. Creo que falta más trabajo y al analizar esto me pongo yo también en la bolsa. Estuve dos años sentada en la oficina de la presidencia y se pueden hacer tantas cosas. Hay que arrancar un diálogo con el Ejecutivo fluido y no lo tuvimos. Lo tuvimos con Fuentes Lema, es cierto. Cada vez que lo llamaba me atendía. Pero no con este Intendente. Esto le saca riqueza al futuro del Distrito, no tengo ninguna duda de eso. La idea del parlamento me encanta, de un gobierno con equipos de trabajo me gusta mucho. Tenemos que aprender mucho todavía y seguir creciendo en esta democracia”.