El Dr. Héctor Díaz, Médico Veterinario a cargo de las oficinas del SENASA en Coronel Suárez, habló con La Nueva Radio Suárez para conocer detalles en torno a la marcha de la campaña de fiebre Aftosa y también sobre otras cuestiones referidas a zoonosis.
“Estamos en plena campaña, que se inició el 26 de octubre hasta el 23 de diciembre. Esta es la campaña obligatoria que se hace dos veces por año, obligatoria para todos los productores. Este es uno de los requisitos más importantes en torno a la sanidad bovina para poder hacer cualquier tipo de movimiento o comercialización de este tipo de explotación. Todo lo que está registrado en el sistema de gestión de sanidad del SENASA no se escapa ningún animal sin ser vacunado. Todos conocemos, no obstante, hay algún que otro animal sin ser vacunado, en la calle, que no están en el sistema. Pero esos animales se vacunan igual, los vacunan los colegas, de forma estratégica. Se trata de producciones familiares, de subsistencia, que no tiene ningún establecimiento físico para declarar. Esos animales se vacunan y se hace la parte sanitaria como corresponde, realizándose la parte de vacunación, constatándose que se vacunó, pero no se cargan al sistema”.
Destacó que hay una muy buena cobertura: “este año me mandaron el informe de la cobertura del 2014, que se había hecho mediante el sangrado, que se registra de forma estratégica y se evalúa la cobertura vacunal y se había llegado a un 88% de la población ganadera. Eso implica también que cuando se empieza con la parición hay terneros que no los abarca la vacuna, que los abarca en marzo. Hay un margen de 2 ó 3 meses que no se vacunan los animales menores, por eso aparece reducido este porcentaje, pero en realidad la cobertura es de un 100%, lo que da también la pauta de la educación que ya tiene el productor en torno al tema de vacunación antiaftosa. A solamente dos productores hubo que citarlos por carta, porque se les había pasado la fecha”.
En cuanto a otras enfermedades animales, y específicamente en torno a la cuestión de la triquinosis, indicó que “el tema de la triquinosis es siempre una cuestión cultural”.
El Veterinario aseguró que “creo que la detección en los animales no es un problema, sino un beneficio que tenemos, porque es la forma de filtrarlo antes que llegue al consumo humano. Creo que la técnica de digestión incimática, como la que se realiza ahora y la que está legalmente aprobada, es una técnica muy sensible y específica, que detecta una larva en 10 gramos de carne”.
El Dr. Díaz concluyó afirmando que “es lo que nos está ahora dando la pauta que también hay una cierta educación de parte del que realiza los chacinados, que es el de hacer el análisis. Por eso cuando se detectan casos de triquina en porcinos implica que se ha hecho el análisis. No es una enfermedad que la vamos a erradicar fácilmente. Lo importante es que se haga el análisis antes de proceder a la elaboración de los chacinados”.