La segunda fecha del Grupo E de la Champions League comenzó con una interrogante que preocupó a todos los simpatizantes del Barcelona: ¿cuánto iba a afectar a su equipo la ausencia de Lionel Messi?
Con un demonio territorial, los de Luis Enrique mantuvieron la misma esencia de siempre, pero la falta de profundidad de Sandro hizo que muchos extrañaran al rosarino. En la más clara del primer tiempo, el canario no pudo quebrar la resistencia de Bernd Leno, quien desvió su remate con un guantazo al córner. El Bayer Leverkusen sufría, pero mantenía la igualdad y apostaba por los contragolpes comandados por Javier Hernández.
Sin embargo, a medida que el cronómetro de Martin Atkinson continuó su curso, el combinado alemán le fue perdiendo el respeto a su rival. Las intervenciones de Hakan Calhanoglu, acompañadas de las apariciones de Karim Bellarabi, amenazaban con la sorpresa. Así, a los 21 minutos un córner ejecutado por el turco encontró la cabeza de Kyriakos Papadopoulos para enmudecer al Camp Nou. La desinteligencia de Marc-André Ter Stegen y la pasiva actitud de Luis Suárez colaboraron para que el griego establezca el 1 a 0.
Además, antes de que se fueran al descanso los comandados por Roger Schmidt merecieron estirar la diferencia. Los amagues del atacante de Berlín descolocaron a la última línea defensiva y los reflejos del ex Borussia Mönchengladbach mantuvieron con vida al "Blaugrana". En tanto, el "Culé" sólo logró dar muestras de agresividad a través de Neymar, quien estrelló un tiro en el palo, que Andrés Iniesta no consiguió capitalizar en el rebote. La ventaja visitante estaba justificada por la pobre producción española.
En el complemento el elenco de Luis Enrique encontró los caminos para revertir el marcador en menos de tres minutos, en lo que significó una ráfaga ajena al espectáculo que protagonizó el Barcelona. Por el sacrificio de Sergi Roberto y la categoría de Luis Suárez, los "Blaugranas" se quedaron con una victoria que dejará más dudas que certezas. A pesar de transformarse en el único líder de la zona, la pobre producción demostrada y la lesión de Andrés Iniesta despertaron la desconfianza de un elenco que está lejos de tener la jerarquía que solía representar. Y todavía deberá esperar dos meses para volver a tener a su máxima figura. El panorama no parece ser el ideal para el campeón defensor de la "Orejona".
Fuente: Infobae.