Mi nombre es Juan Francisco Colunga Urban, soy profesor egresado en la Facultad de Bellas Artes de La Universidad Nacional de La Plata, trabajo como docente en primaria, secundaria y secundaria vespertino (nocturno). Soy profesor en artes plásticas con orientación en dibujo y pintura, quien me conoce sabe que siempre ame dibujar y hacer diseños y siempre agradezco que HOY puedo vivir enseñando y produciendo arte.
Pasado el fin de semana, leyendo las noticias locales en sus portales digitales, me enteré de la visita de Esteban Bullrich ministro de Educación de Mauricio Macri en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y de los dichos –desafortunados en mi opinión para los que somos defensores de la escuela pública-- que dejó en su conferencia de prensa en el bunker de Cambiemos.
Mi condición de docente egresado en educación pública en todos los niveles, primaria, secundaria y universitaria no me permite pasar por alto varios de sus comentarios, sobretodo el que dio origen al titular denuevodiadigital.com “Antes repartían choripanes, ahora reparten computadoras, pero eso no es educar”.
Referirse de manera “despectiva” al programa nacional “Conectar Igualdad” que entregó en el país más de 5 millones de netbooks de manera GRATUITA y en Coronel Suárez más de 5500 equipos a jóvenes de escuelas secundarias del distrito; me parece un error, no sólo por la comparación que hace, sino porque habría que recordarle al Sr. Bullrich que el GOBIERNO NACIONAL DE NESTOR Y CRISTINA KIRCHNER, hizo una INVERSIÓN HISTÓRICA EN EDUCACIÓN, construyendo miles de escuelas, primarias y secundarias; jardines de infantes, centros de educación complementaria, escuelas técnicas, universidades, millones de libros entregados a escuelas y bibliotecas; logros, derechos y POLÍTICAS PÚBLICAS que serían imposible enumerarlos en una carta de lectores.
Cómo puede venir a hablarnos de la necesidad de una “Revolución Educativa” un ministro cuya gestión se caracterizó por contar con “colegios tomados, estudiantes porteños movilizados por mejoras edilicias, calefacción, techos que se caen y cursos que se cierran”; ¿esa es la “educación pública que queremos para nuestros jóvenes?
Tengo 31 años, cuando tenía edad de secundaria eran los años finales del neoliberalismo Menemista y el comienzo de la inoperancia de De la Rua, ojala en aquella época hubiera existido al menos un programa como los que existen hoy gracias a este gobierno; mi primer computadora me la pude comprar cuando me faltaba un año para recibirme de profesor con casi 30 años.
¿Cuantos más jóvenes hubieran podido cumplir sus sueños de haber existido estos programas hace 20 años atrás?.
No puedo permitir que Esteban Bullrich diga que estas políticas no sirven porque tengo mil ejemplos para demostrar lo contrario al igual que la mayoría de mis compañeros de beca o de cursada, y otros tantos jóvenes de Coronel Suárez que hoy son profesionales por haber tenido la “oportunidad de estudiar en una residencia municipal”.
Sé que como yo hay muchos, que no somos tontos, nos informamos, leemos y entendemos lo que queremos y lo que no, todo esto sin hablar del proyecto económico que pretenden imponer y que por suerte de eso también estamos informados y de algo estamos seguros y lo gritamos con verdadero orgullo NUNCA CAMBIEMOS!!!