El 11 de septiembre se conmemora en nuestro país el Día del Maestro. Sin embargo resulta poco habitual que en el marco de las celebraciones alguien intente preguntarse sobre la realidad del trabajo docente.
La convulsión política y social que vivimos, algunos como testigos y cómplices, otros como librepensadores, no escapa al ámbito educativo. Los docentes hemos dejado de ser solamente formadores para empezar a cubrir la infinidad de necesidades que el Estado ignora. Y esto, claramente, nos sitúa en zona de conflictos.
Reclamamos y luchamos en defensa de los derechos laborales, mientras somos, paralelamente, el centro de las demandas sociales.
Y esto no se trata de profundizar un debate en el que unos y otros quedemos enfrentados por expresar libremente una idea. Cuando hablamos de educación hay una sola verdad: la que vive un docente con sus alumnos dentro del aula. Hablamos de “jugar a todo o nada” la posibilidad de cambio. La posibilidad de que el universo de cada alumno se modifique y se complete.
No es posible que un ser humano sea libre sin educación.
Es por esto que hoy merecen ser nombrados todos los docentes que hacen de su trabajo una forma de vida, que eligen el compromiso y depositan en sus alumnos la posibilidad de crecer en libertad e igualdad.
Gracias a todos aquellos que viven la docencia, sabiendo que el camino del cambio se transita cuando podemos unirnos para luchar por el bien de todos.
¡Feliz Día! UDOCBA Coronel Suárez
Natalia Castro - Secretaria General
Melina Salman - Secretaria Adjunta