Joaquín Alberdi nos acompañó en la recorrida y nos fue presentando las grandes figuras que llegaron a la ciudad para participar de la Feria del Vino.
Y allí nos presentó a Pepe Reginato, quien nos habló de sus espumantes, de sus etiquetas Celestina, en homenaje a su madre, y Chaman, a su padre. Trajo a Coronel Suárez la imagen característica de Mendoza, la capital del vino, y con toda sencillez habló de su historia familiar.
La familia Reginato es pionera en la producción de espumantes. Durante los últimos 30 años han producido champenoise para las principales Bodegas de Argentina.
Pepe, cabeza de la familia actualmente, trabaja conjuntamente con Vicentin en la creación de nuestros espumantes.
Chaman era la persona que poseía más "sabiduría", el que sabe. La sabiduría la adquirían a través de la experiencia y eran educados por el anterior Chaman. Entonces, cuando eran jóvenes, eran "aprendices" y se pasaban todo el día junto al Chaman, adquiriendo conocimiento y sobre todo experiencia. Esa sabiduría es pasada de generación en generación.
“Con el vino Chaman queremos transmitir esa sabiduría que surge de la experiencia de haber cosechado la uva y elaborado el vino en La Consulta por 60 años” dijo Pepe.
La Familia Reginato siempre ha estado ligada al vino. Luis y Pepe son descendientes de italianos que llegaron a La Consulta en 1903.
Nos dejó algunas frases reveladoras de su experiencia familiar: “Me dedico a que la gente esté contenta. El tiempo es la técnica de todas las cosas de la vida; el espumante es una de las cosas que más tiempo necesita”.