Le corresponde votar en la mesa número 20 de la Unidad Académica, ex Colegio Nacional. Tiene por costumbre ir a votar por la tarde, luego que cierra su rotisería ubicada en la calle Mitre. Pero en esta ocasión Oscar y su hijo Leo se dirigieron tempranito al lugar donde debían votar para librarse de esta responsabilidad ciudadana y quedar el resto del día dispuestos para el trabajo habitual del día domingo en su comercio.
Al llegar se enteró que la mesa Nº 20 no estaba habilitada todavía. Ni la Presidenta designada por la Justicia Electoral ni su suplente se habían presentado para cumplir su responsabilidad. Para entonces el reloj avanzaba hacia las 9 de la mañana.
Entonces Oscar Ferreyra, que para el momento había quedado en los primeros lugares de la fila que se había desarmado y vuelto a armar, compuesto por un nervioso grupo de ciudadanos, dando ejemplo cabal de ciudadanía, se propuso para cumplir esa responsabilidad.
Le dijo a su hijo que debía traerle los lentes, “porque no veo un pomo”. El Delegado Electoral del establecimiento le ofreció los suyos mientras tanto, para ir completando las planillas correspondientes a la apertura de la mesa.
Se dispuso toda la documentación al cuarto oscuro, donde se ubicaron correspondientemente las boletas. Los Fiscales de los partidos políticos, que desde mucho antes de las 8 de la mañana se encontraban en el lugar para hacerse cargo de su responsabilidad, respiraron aliviados por la apertura, al fin, de la mesa.
Se terminaron de hacer las firmas correspondientes. Apareció la esposa de Oscar Ferreyra, que le entregó los anteojos y tomó nota de todos los pedidos con los que había que cumplir en la rotisería. Acto seguido el Presidente dispuso a emitir su voto, como corresponde, dejando inaugurada la actividad de la mesa Nº 20.
El acto se coronó con un aplauso de todos los presentes: Policía, soldados, Fiscales, autoridades del Correo, autoridades electorales de la escuela, y también resonaron aplausos de aprobación de las otras mesas, donde la actividad era normal desde poco después de las 8 de la mañana.
Finalmente, a las 9:50 horas, se declaraba abierta la mesa Nº 20 del Colegio Nacional, donde para entonces un número cercano a las 30 personas aguardaba para ejercer su derecho a voto.
Oscar Ferreyra el domingo dio uno de los más destacables ejemplos de buen ciudadano en la jornada electoral.