Andrea Esnaola, de 47 años, portera de la Escuela Técnica 1 de Pehuen Có, en el distrito de Coronel Rosales, el pasado miércoles se retiró media hora antes del horario habitual. Su cartera y el celular, incluso, habían quedado en el establecimiento.
Su marido desde hace pocos meses, pero con quien convive hace más de 20 años, Gustavo Martínez Ipucha, fue quien se presentó ese día en el destacamento policial y denunció su desaparición, aclarando que al ir a buscarla a su trabajo, ella ya no estaba. "Estamos desesperados, no puede ser que nadie sepa de ella, nunca tuvo un comportamiento extraño, ella es muy tímida y no teníamos problemas. Estábamos programando las vacaciones, pero nada me hacía pensar que pase algo raro", afirmó ante los medios.
"Pedimos que nos ayuden, que se sumen todos los que puedan darnos una mano para buscarla. No podemos entender que pasó, si se fue o la llevaron", aseguraba el hombre, que este domingo intentó quitarse la vida. En medio de los rastrillajes que continúan, él se internó con su cuatriciclo en la zona denominada "Punta Mingo", momento en que empuñó un arma y disparó a su cabeza. Sin embargo, se encuentra con vida internado en la clínica Matera, de Bahía Blanca, donde es asistido en el área de terapia intensiva, sedado y estable.
Ante ello, la fiscal dispone dos allanamientos, uno en la casa del matrimonio y otro en la casa de la madre de Martínez Ipucha, que se realizaron la noche del domingo entre las 20 y las 21:30. En la casa del matrimonio se encontró una carta de puño y letra de Martínez Ipucha que fue clave: "Perdí toda esperanza de encontrarla. No soporto más sin ella".
La última persona que asegura haber visto a Andrea con vida es una de sus vecinas, que afirma habérsela cruzado, en dirección contraria a su casa, alrededor de las 18. Policías, bomberos y prefectura continúan con los rastrillajes, intentando encontrar a la mujer.
Fuente: Infobae.