El domingo lluvioso y desapacible fue ideal para compartir un té, con repostería casera y jugar a la lotería en las instalaciones del Centro de Papeleros Suarenses de la calle Las Heras que fue especialmente cedido al efecto para pasar un grato momento y colaborar con una entidad que es imprescindible en la ciudad de Bahía Blanca y con el plus solidario de tender una mano a vecinos de aquella ciudad que presentan condiciones de indigencia.
Por lo cual las Hermanas religiosas no solo cumplen una misión sagrada de cuidar, atender y administrar a los residentes que viven en el Hogar Don Orione con capacidades diferentes, algunas patologías de extrema gravedad por lo cual la labor es imprescindible, muchas dependiendo del amor solidario de la gente y en algunas oportunidades se pueden advertir situación de olvido de familiares hacia quienes padecen patologías terminales de discapacidad.
En Coronel Suárez hay una voluntaria que silenciosamente trabaja, Angélica Sepúlveda secundada por un grupo que la acompañan que siempre está atento a las necesidades extremando esfuerzos para concurrir con ayudas, ferias americanas domiciliarias, otros beneficios como el te que sirvieron el domingo pasado, todo lo cual se destina a la obra Don Orione de la ciudad de Bahía Blanca y que esta a cargo de la Congregación de “Las pequeñas misioneras de Don Orione”.
El domingo en el Centro de Papeleros y en diálogo con La Nueva Radio Suárez la Hermana Directora del establecimiento agradeció el aporte de Coronel Suárez por eso vinieron con una delegación de religiosas y un grupo de internos en una combi propiedad del Hogar para conocer la ciudad y saber quienes son los que colaboran y agradecer a quien aportan un granito de arena día a día “donde no solo lo material es importante para el sostenimiento de la obra, porque hace mucho mas la solidaridad y la familia, ver a estos chicos que no conocen a su familia, ver de repente que hay mucha gente colaborando con ellos que sienten a los suarenses como parte de su familia y para nosotras, las Hermanas, son nuestros brazos y donde vamos nos damos cuenta que todo esto es mucho más de lo que podemos hacer nosotros” expresó la religiosa mientras miraba atentamente el salón repleto de gente cooperando con la obra.
La Hermana Directora luego agregó que “Don Orione” actualmente se sostiene con donaciones de la comunidad, una pequeña parte con ayuda del Estado y ahora estamos tratando de lograr una habilitación para generar mas ingresos de las obras sociales, pero se necesita mucho para cubrir gastos edilicios todo lo cual representa dinero, los sueldos del personal y para generar dinero tenemos que hacer todo esto”.
Luego agregaba que “necesitamos dinero para los sueldos además” y señaló que tienen 20 chicos entre 8 y 45 años, y 10 abuelos, de los cuales solo 5 reciben PAMI, otros tienen un ayuda municipal y otros no tienen nada pero no obstante destacó las colaboraciones de los profesionales, plomeros, arquitectos, contadores que siempre están dispuestos a sumar su trabajo junto a los voluntarios permitiendo así la continuidad del servicio.
Luego explicó que “el establecimiento atiende todas las discapacidades desde lo mental, lo físico y en el caso de los abuelos algunos no tienen complicaciones neurológicas pero si físicas como es gente que ha vivido en estado de calle o alcoholismo, la mayoría tiene deterioro cerebral por el alcohol o bien por un ACV que le ha producido una hemiplejia, es decir gente a quien debemos recuperar su autoestima y vuelen a vivir en este Hogar ya que han perdido hasta su familia, donde les cuesta la relación el trato, por eso intentamos vivir este clima familiar donde las Hermanas, los Voluntarios son como los hijos, los padres un poco de todo incentivando la convivencia entre ellos”.
Uno de los momentos mas dolorosos explicados por la Directora es la falta de las familias de los internos: “pocas vienen a visitarlos”. La religiosa reconoció que “en este momento la sociedad ha perdido el valor de la familia y con estos chicos mas, y la verdad que se pierden una gran riqueza, yo que estoy hacer 15 años en la familia religiosa he aprendido mucho a valorar la familia, sobre todos quienes no la tenemos cerca, ellos son mi familia entonces quererlos, levantarlos, bañarlos, es como estar con mis seres mas queridos”.
La Congregación “Las Pequeñas Hermanas Misioneras de Don Orione” es quien conduce los destinos del establecimiento que este año estará cumpliendo los 100 años de su fundación”.
En el transcurso del té se ofreció un video sobre las actividades en el Hogar, la delegación que llegó desde el establecimiento estuvo acompañada por la Directora y otras hermanas, y pudimos apreciar un numeroso grupo de convecinos de nuestra ciudad inclusive de los Pueblos Alemanes comprometidos con la labor social y solidaria a quienes se les valoro su predisposición para con la entidad.
La voluntaria de nuestra ciudad, Angélica Sepúlveda, fue quien agradeció en nombre de la ciudad, la colaboración, la presencia de la gente que lleno el Salón de los Papeleros y le cedió la palabra a la Hermana Directora, joven, con gran empuje y decisión abordaron la combi y conocieron esta faceta solidaria de Coronel Suárez.
A la población, cuando le soliciten una colaboración para el Hogar Don Orione de la ciudad de Bahía blanca, ya conoce el destino y la admirable razón de la obra.