No se agotaban las posibilidades que nos dio a la población de Coronel Suárez de seguir descubriendo entretelones del conflicto bélico de 1982, vivir intensamente la entronización, compartir la eucaristía, agradecer a la virgen por el magnifico día con casi 26 grados de temperatura en la ciudad, cuando los veteranos de nuestra ciudad Brodsky y Rowhein convocaban a sus camaradas para ser presentados uno por uno y revivir otros detalles de sus vidas familiares, sus experiencias militares, la vuelta después de la capitulación, el pos Malvinas, la pretendida desmalvinización, los suicidios, los que dejaron sus vidas en las islas irredentas y sus “fojas de servicio” valorando actos de servicios y dimensionado todo lo que implica Malvinas.
Para ello nada mejor que Oscar Teves para conducir la presentación en la carpa, el historiador de Coronel Suárez, uno de los hombres del país que con mayor seriedad y rigor histórico a seguido la causa Malvinas, sus entrevistas personales con veteranos de todos el país, encontrarse con protagonistas de hechos valientes en plena batalla, el autor de libros especializados en la gesta que son factor de consulta en el país y fuera de las fronteras de Argentina, documentos de la historia de Malvinas, hasta sorprendernos con un verdadero hallazgo.
En su último viaje a Malvinas logra apoderase de restos de un avión de la Fuerza Aérea Argentina que fue derribado por error por efectivos de nuestro país donde su piloto muere en consecuencia.
No solo Teves trajo esos trozos del avión sino que logró dar con la viuda de ese piloto quien actualmente reside en Tandil, invitarla para el acto del sábado y en el momento de reunir a todos los Veteranos, hacerle entrega de esa pequeña muestra del avión que fue presentada en una caja junto a la una bandera nacional.
La mujer no tuvo palabras, solo un gracias y su rostro invadido por la emoción atesoró esa caja, miro fijamente lo que quedó de ese avión piloteado por su esposo muerto en las heroicas batallas de nuestra Fuerza Aérea y retuvo fuerte entre sus manos semejante prueba que ahora permanecerá junto a tantos recuerdos, en una historia que comienza a armarse como un rompecabezas con líneas, formas y hechos de la historia contemporánea del país.
Todos los Veteranos resultaron valiosos, no solo por lo que hicieron, no solo por la reivindicación que como sociedad los debíamos, sino como mudos testigos de su juvenil experiencia de hace 32 años atrás no eran “los chicos de la guerra”, eran los hombres con todas las letras, con todo lo que implica que estaban frente a nosotros y nos contaron los momentos, los miedos, la incertidumbre de aquellos días entre aciagos y patrióticos, nuestra sociedad, nuestro compartimiento, el olvido, la indiferencia, una mezcla de sensaciones que afloraron en una tarde otoñal, con saber primaveral, casi un contrasentido para un hecho que sigue palpitando en el mas profundo sentir nacional.
Bajo la misma carpa se encontraba la bandera que trajo el padre Vicente que se enarboló en Malvinas en el atardecer del 1 de abril del 82 a poco que los buzos tácticos pisaron tierra malvinera y la cruz original del cementerio Darwin identificatoria del teniente Estevez.
Los ex combatientes que estuvieron este fin de semana en Coronel Suárez:
Oscar Teves presentó a cada uno de los ex combatientes de Malvinas que estuvieron este sábado en Coronel Suárez, dando muestras acabadas de conocer a cada uno de los presentes, no solo de nombre, sino de su historia dentro de la guerra de Malvinas.
-El padre Vicente Martínez, que estuvo varias veces en Coronel Suárez “nos gusta que vuelva siempre a Coronel Suárez. El fue también compañero del viaje a Malvinas en 2010, y su tarea malvinizadora creo que es conocida por muchísimos argentinos a lo largo y ancho del país”.
-El coronel mayor en actividad, Lautaro Giménez Corbalán “era un joven subteniente del Regimiento de Infantería 4 de Monte Caseros. El combatió en la zona de Monte Harriet. Es un estudioso del tema y ha escrito el que yo considero también uno de los mejores libros que se han escrito sobre el conflicto, Malvinas en primera línea, que trata especialmente todo lo que vivió el Regimiento de Infantería 4.
- Teodoro Flores, “era soldado de Lautaro Gimenez Corbalán, que aún hoy, a 33 años del conflicto, continúan esa relación que forjaron en las islas, y viajan a muchos lugares del país para dar charlas. Teodoro viene desde Monte Caseros, en Corrientes, por lo que hizo un montón de kilómetros para estar acompañándonos.
-Manuel Larrosa, suboficial mayor retirado, “estuvo muy cerca de Lautaro en Malvinas, en Monte Harriet, formando parte del comando de Infantería 3 y también le tocó participar en combate. Formaba parte de un pequeño grupo de la brigada que fue destinado a apoyar al Regimiento de Infantería 4, con el que pasa la mayor parte de sus vivencias en las islas. Creo que la historia de la sección olvidada, la vamos a tener en poco tiempo más, plasmada en un nuevo libro de Lautaro Giménez Corbalán”.
-Cosme Hipólito Luna, suboficial mayor retirado. “El estaba en el grupo de Artillería 3. Esta es una de las primeras veces que recibimos artilleros en Coronel Suárez, por lo que estamos muy contentos que estén en esta oportunidad”.
-Carlos Alberto Di Santo, “soldado arribeño del Regimiento de Infantería 6, que vino la semana pasada para ver cómo era Coronel Suárez, y hoy nuevamente se hace presente, por lo que por el doble esfuerzo que ha hecho estamos muy agradecido”. Respondió a esta presentación, que “estoy muy contento de estar acá. Me unen dos cosas, tener amigos como vos, que estudias la historia con una dedicación que genera una tremenda admiración, y también a Juan Galvarino, con quien tuve el honor de compartir un viaje por la Cordillera a lomo de mula, llegando a Chile”.
-Víctor Mendoza, “que en Malvinas era un muy joven cabo, del Regimiento de Infantería 12. El estaba en la sección que se llama Exploración, que en operaciones es la fracción que sale a explorar el terreno a hacer reconocimientos. Le tocó participar del combate de Darwin, que seguramente muchos han conocido por distintas historias y por el trabajo mío sobre Pradera del Ganso. Él fue herido en ese combate. En ese combate es donde muere el teniente Estévez”.
-Oscar Carabajal, suboficial de comunicaciones, compañero de Rubén Rowhein y de Hugo Coronel, que está en esta tarde, pero que en este momento no está en esta carpa. Pertenecían los tres al Batallón de Comunicaciones 181 de Bahía Blanca”.
Más adelante Oscar Teves presentó a quienes se reencontraron, luego de 33 años de haber estado en Malvinas: Héctor Ferreyra y Daniel Fernández. “Eran de distintas unidades pero les tocó estar juntos en San Carlos, donde se produjo el desembarco británico y una pequeña fracción de soldados a pie, de infantes, les tocó ver el desembarco y enfrentarse con algunas tropas británicas que estaban desembarcando en helicópteros. Esa fracción, de 46 hombres, con fuego de fusiles derribaron dos helicópteros ingleses, averiaron a otros dos, y sin sufrir bajas –ni heridos ni muertos- pudieron replegar hacia Puerto Argentino caminando, tardando varios días. Estos dos amigos se han encontrado hoy, Héctor y Daniel. Se reconocieron en la entrada. Así que después de mucho tiempo tuvieron una gran alegría. De cuando ese grupo de soldados regresa a Puerto Argentino hay filmaciones y se busca en Internet hay declaraciones. Es un testimonio de la época que no mucha gente tiene”.
-Néstor Iriarte “es un veterano de la Armada Argentina, estaba embarcadado en el destructor Santísima Trinidad con el grado de Cabo 1ero y le tocó participar con la recuperación de Malvinas el 2 de abril. Es un amigo de hace muchos años, vive en la localidad de Pigüé, y es un asiduo visitante junto con los otros veteranos”.
-Amilcar Tejada, Suboficial mayor, de Infantería de Marina, “es la primera vez que recibimos a Infantes de Marina de nuestra ciudad. Estaba destinado al Batallón de Comunicaciones N°1, fue asignado en su tarea de comunicante al Batallón de Infantería N° 5. En ese contexto Amilcar, junto con una sección de infantes de Marina, reforzada por personal de Ejército, que venía replegada de otros montes, enfrentaron en la noche del 13 al 14 de junio del ´82 el ataque de los guardias escoces británicos. Es protagonistas de uno de los enfrentamientos más duros de la guerra de Malvinas. En ese combate muere el subteniente Silva, que pertenecía al regimiento de Infantería 4”.
-“Otros tres amigos que también nos visitan, Rolando Tisuoco, Norberto Dalmedo y Alfredo Harley. Estuvieron en el regimiento de Infantería 7 de La Plata, que les tocó combatir en Monte London. Rolando y Alfredo en el mismo sitio, Norberto en otro puesto de combate, encargado de la logística del Regimiento, tuvieron que llevar adelante su campaña poniendo todo el esfuerzo. Tenían que darle de comer a 700 u 800 hombre, con lo que podían tener a mano. A Rolando y Alfredo les tocó combatir en la primera noche de combate nocturno en los alrededores de Puerto Argentino, contra el tercer batallón de paracaidistas ingleses. Norberto y Alfredo se volvieron a encontrar en Malvinas en noviembre de 2012, en las posiciones que habían ocupado. No se reconocieron hasta que empezaron a hablar y se reconocieron.
Por supuesto, que como anfitriones, viviendo la jornada con mucha emoción, estaban los ex combatientes suarenses, Rubén Brodsky y Rubén Rowhein. Por cuestiones familiares, Héctor Sauer no estuvo en la ciudad, pero se comunicó a media tarde con su amigo Rubén Rowhein para dejar un saludo a todos los ex combatientes.