Hasta el lunes el Profesor Alejandro Socas, de la Universidad de Buenos Aires, continuó realizando el curso de herrado de caballos para dos grupos de veinte alumnos cada uno, luego de una primera instrucción que tuvo lugar el sábado que incluyó teoría y práctica para un grupo mayor de asistentes. Entre domingo y lunes tuvieron lugar las experiencias prácticas por parte de los inscriptos, para continuar con esta capacitación que tendrá otras clases en los meses próximos.
La primera parte de este curso, que tiene los auspicios del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y de otros organismos, y tiene la organización de la Agencia de Extensión INTA Coronel Suárez, se llevó a cabo en la Sociedad Rural y las dos siguientes en las instalaciones del Polo Club.
Consultado por La Nueva Radio Suárez, el Profesor Socas comentó que “en las clases prácticas hemos hecho análisis viendo cómo pisa, cómo camina cada animal, para después encarar el trabajo, pensando qué es lo que hay que hacer”.
El instructor había traído herramientas para que pudieran trabajar simultáneamente 20 alumnos y al ser entrevistado consideró que “cada grupo de 20 va a tener, aproximadamente, cuatro prácticas de herraje”.
El Profesor Socas insistió en la importancia de “poder pensar, ver al caballo, diagnosticar qué es lo que tiene, cómo está parado, cómo son sus aplomos y poder pensar en el momento de herrarlo. No es tan simple como agarrarlo, cortarle el vaso y clavarle una herradura. Hay que analizarlo, ver cómo pisa y con la pisada que tiene analizar qué problemas puede tener a futuro, para poder prevenir. Los que estuvieron en la charla comprendieron bien eso y ayer lo pudieron demostrar de manera práctica. Se trabajó bien, pensado en lo que había que hacer. Estoy muy conforme con el resultado. Un mal herraje produce un montón de lesiones a largo tiempo y a veces a corto plazo, depende de cuál sea el error”.