Un momento importante dentro de la celebración de cada aniversario de Santa María es la entrega de la distinción “Santa María Honor al Mérito”.
Este año la recibió el Padre Antonio y en él a la Congregación del Verbo Divino, que se despide de su labor religiosa en los Pueblos Alemanes.
Luego de recibir la distinción el Padre Antonio formalizó una reseña de la historia de la Congregación en Santa María.
“Siempre hay uno primero y uno que es el último. A mí me ha tocado ser el último de los Misioneros del Verbo Divino aquí en los Pueblos Alemanes. Hace más de 125 años llegaron los primeros Misioneros del Verbo Divino para atender las Colonias de Alemanes del Volga, que empezaron en Santa Fe, en la ciudad de Esperanza, luego en Entre Ríos. A través del Padre Luis Servet, Párroco de la Colonia Hinojo, supieron de estas Colonias en Coronel Suárez. Hay que sacarse el sombrero: de la Colonia Hinojo, que son casi 180 kms., venía en sulky dos o tres veces al año para atender estos asentamientos. Así en agosto de 1896 llegaron los primeros Sacerdotes del Verbo Divino a estas tierras. Casi 119 años de atención para que la gente viva plenamente la fe que recibieron de sus pioneros”.
Cerró diciendo que “no perdamos la fe. Los pueblos que pierden sus tradiciones pierden el futuro de su destino, decía Avellaneda. Por eso a todos los colonos les pido por favor sigan con esa fe que trajeron los pioneros para vivir como hijos de Dios y hermanos. Agradezco a todos. Y este honor que me han dado con esta distinción lo entrego a toda esa lista de sacerdotes a los cuales he conocido y a muchos de ellos no les llego ni a la planta de lo pies en la tarea sacerdotal”.
Al finalizar su discurso recibió otros regalos y presentes que le acercó la comunidad de Santa María y un extenso aplauso de agradecimiento.
Especialmente agasajados también, con la entrega de la distinción, fue el grupo de Equinoterapia De Corazón. Recibió la distinción Hernán Saniuk, que es su actual Presidente, pero estaba acompañado por Carmen Adam, quien estuvo a cargo de la presidencia por muchos, desde su fundación, hasta este año.
La institución se creó en el año 2008, luego de meses de trabajo, haciendo realidad el sueño de varias personas de contar en Santa María con esta disciplina al servicio de los niños y jóvenes con capacidades diferentes.
Al momento de hacer uso de palabra, Hernán Saniuk agradeció al Delegado de Santa María y la distinción la compartió con Carmen Adam y Liliana Macari, “que fueron las fundadoras de lo que es hoy Equinoterapia. A nosotros nos queda seguir por el buen camino, darle empuje a los chicos que tanto les gusta esta actividad. Especialmente se lo dedico a Maxi Fogel y a toda su familia”.
Maxi Fogel fue un entusiasta concurrente a las actividades de equinoterapia, fallecido durante el último fin de semana.