A tres días de las PASO porteñas, los precandidatos para la jefatura de Gobierno del PRO, Horacio Rodríguez Larreta y Gabriela Michetti, hicieron un balance de la interna entre ambos y buscaron poner paños fríos, aunque también se reconocieron tensiones.
"Hubo tensiones en la competencia porque si no, no sería competencia. No vamos a negar eso, todo el mundo lo ha visto", reconoció Gabriela Michetti. De todos modos, recalcó que "ahora estamos en una mejor situación, más razonable, porque el proyecto es el mismo para ambos".
En un intento de dejar atrás las tensiones, la precandidata a jefa de Gobierno afirmó: "Yo nunca me enojé, dije exactamente lo que sentía. Es la primera vez que el PRO vive una competencia interna y salimos bastante bien. Otros partidos hacen desastres".
De todos modos, durante una entrevista en TN, Michetti planteó un objetivo para diferenciarse de Larreta: "Yo propongo algo que es distinto. En la Argentina que viene, el jefe de Gobierno también tiene que tener un rol nacional. Hay que levantar al país desde la Ciudad de Buenos Aires. Quiero que desde Capital Federal se luche contra los males que tiene hoy toda la Argentina". En ese sentido, prometió "un liderazgo contra la corrupción, el narcotráfico y el deterioro de los valores de la convivencia".
Por su parte, Horacio Rodríguez Larreta prefirió no admitir conflictos: "Nunca subí el tono. Le tengo mucho afecto y respeto a Gabriela". Además, no descartó incluirla en su equipo en caso de resultar electo como jefe de Gobierno: "Nosotros somos un equipo, cada uno con su rol. Esperemos al lunes, después de las elecciones, para ver qué va a pasar con Gabriela, pero vamos a estar juntos como siempre, con ella y todo el equipo".
El miércoles, en una charla de café con un equipo de periodistas de Infobae, Michetti se había expresado en la misma línea y anticipó que "Horacio podría tener un rol en mi gobierno".
Fuente: Infobae.