El lunes 16 de marzo se cumplieron 25 años del fallecimiento del Dr. Julio César Lovecchio.
Notables docentes que se formaron bajo la influencia del Dr. Lovecchio como Rector del Colegio Nacional en la mañana del lunes se emocionaron al volver a escuchar su voz clara, firme, que no admitía discusiones, no por autoritarismo sino por autoridad ganada con la experiencia, decir que un docente nunca muere, porque se prolonga en la vida de quienes fueron sus alumnos.
Las había pronunciado en el “Volver a vivir de la educación”, un ciclo de programas que se emitió en su momento por LU36 en el año 1986, bajo la organización de Oscar Durand y la colaboración de Nancy Augusto.
En esa ocasión se había reunido a entrañables docentes suarenses, la mayoría jubiladas. El Dr. Lovecchio fue quien ofreció el discurso final en ese programa, destacando la enorme trayectoria de todos aquellos exponentes de la educación local que participaron del programa.
Y esas palabras volvieron a escucharse a través de los parlantes de la escuela que él creó como parte central del acto en el que se recordó su figura y su obra a 25 años de su fallecimiento en la Unidad Académica que lleva su nombre.
El acto fue organizado por el Centro de Ex Alumnos del Colegio Nacional.
Susana Schnegelberger, ex alumna y ex docente y secretaria, leyó palabras escritas por Adriana Meyer, integrante del cuerpo directivo de la institución educativa.
“Fue por 40 años Rector del querido Colegio Nacional. Es necesario hacer una pausa en nuestras rutinas cotidianas para rendir homenaje a aquellos hombres y mujeres que consagraron los mejores años de su vida en beneficio de la comunidad en la que viven”.
“El Dr. Lovecchio fue un hombre excepcional, cuya obra merece destacarse año a año, para que las nuevas generaciones no desconozcan el legado que les dejaron los que estuvieron antes. Su rectoría marcó el rumbo de esta institución y le dio mucho de su estilo, de su personalidad, de sus convicciones. Un sentido inigualable de fraternidad, compartido hoy por todos los miembros de esta comunidad. Era un incansable trabajador, formador, administrador y consejero. En sus clases y en su vocación política y administrativa se destacó por sus condiciones oratorias”.
Estas fueron algunas de las palabras con que se recordó al Dr. Lovecchio.
Fue su hija, Fernanda Lovecchio, quien, emocionada, agradeció el recuerdo de su padre y el haber tenido ocasión de volver a escuchar sus palabras.
Luego el acto se cerró con la canción “Estudiantina”, que identifica al Colegio Nacional y cuya creación corresponde al Dr. Lovecchio y a la recordada también Profesora de Música Carmencita Marcos.
Luego una delegación representativa, encabezada por Pablo Paissaud, actual Director de la Unidad Académica, se dirigió al Cementerio Municipal para descubrir una placa del Centro de Ex Alumnos del Colegio Nacional en la sepultura de la necrópolis donde descansan los restos del recordado Rector.