Un pueblo sin memoria va perdiendo poco a poco su identidad y la riqueza de su cultura. Preservar la memoria colectiva, mantener viva la cultura, es, sin duda alguna, la mejor manera de preservación y conservación del patrimonio cultural de un pueblo. Estamos hechos de un pasado que nos fue construyendo como individuos y sociedad desde las raíces, somos el fruto de esa transmisión de la cultura, de ese patrimonio tan rico y tan propio.
En nuestra comunidad hubo quienes dejaron su impronta a través de variadas manifestaciones del arte, hombres y mujeres que en sus trazos, en su palabra, en su música, encienden en nosotros la llama viva de la memoria colectiva.
Es por ello, y en el contexto de la celebración del Día de la Mujer, que Isidoro Espacio de Arte inicia su actividad anual este viernes a las 15 hs. con una muestra pictórica de una artista que supo a través de su pincel dejarnos un testimonio de su época. Se trata de Isolina Schwindt Gottau.
Isolina nació el 28 de septiembre de 1934, pasó su infancia en el campo de la familia en D’Orbigny, al morir su madre se muda junto a su padre al Pueblo San José.
Durante su juventud realiza sus estudios de Arte por correspondencia, estudios que le valieron su desempeño como docente dedicada a la enseñanza de arte, invitada por la Hermana Joela comienza a enseñar en la Escuela Parroquial del Pueblo Santa María. Durante sus estudios Isolina, en sus ejercicios, retrata a los vecinos de su pueblo, imágenes que luego sigue plasmando en sus obras.
“Fallece en el año 1993 a los 59 años, dejándonos así un testimonio invaluable de su época y que hoy gracias a la buena predisposición de su sobrina Maria Elsa Schwindt y al patrocinio de Anahi Wainmayer podemos tenerla aquí en nuestra sala. Un homenaje a la mujer, a la memoria, al patrimonio cultural del cual somos fruto, custodios y transmisores y principalmente a la vida”.
Organizan: Biblioteca Popular Infantil e Isidoro.