El Padre Fabio pertenece a la Congregación Instituto del Verbo Encarnado, que nació en Argentina con el objetivo puesto en la tarea misional.
La Congregación nació en San Rafael, Mendoza, en 1984, creada por el Padre Carlos Miguel Buela. Religiosas y religiosos van a distintos lugares del mundo, “el carisma es anunciar el Evangelio y llevarlo a las distintas manifestaciones del hombre. Por eso es que se trabaja en ámbitos muy distintos, desde la cultura, las universidades, atender parroquias, colegios, a niños huérfanos y discapacitados en diferentes lugares. También atención de la niñez y los ancianos”, cuenta el Padre Fabio, quien en estos días ha estado en Coronel Suárez visitando a su familia.
En estos 13 años de sacerdocio, y al ser entrevistado por La Nueva Radio Suárez, comenta que ha estado en casas de formación, “fui maestro novicio durante cinco años, nuestro noviciado está en Chile, luego estuve en la casa madre, en el seminario, como formador también. Luego fui enviado a una misión muy especial en Groenlandia”.
Sobre esta particular experiencia misionera cuenta que “es la isla más grande del mundo, es muy poco habitada, territorialmente es 20% más pequeña que Argentina. Tiene 56 mil habitantes, la mayoría protestantes; católicos son muy poquitos, y hay una sola parroquia en toda la isla. Nuestro instituto ha estado trabajando atendiendo a esos pocos feligreses, la mayoría de ellos extranjeros, los cuales van a trabajar con algún negocio o como empleados en diferentes empresas. Me tocó vivir un tiempo con un Párroco de Argentina y luego un Sacerdote de Estados Unidos. Pudimos conocer el pueblo esquimal, que es muy interesante en sus vivencias, en su simpleza, y también al pueblo danés, considerando que la isla pertenece a Dinamarca”.
Sobre el pueblo esquimal relata el Padre Fabio que “son gente muy sencilla, muy tímida, es gente de fe, simple, muy atenta con los demás, muy servicial y dispuesta a recibir las buenas cosas que uno le pueda proponer. También con sus problemas, como todas las sociedades. Ahora, en los últimos años, se ha dado un índice muy alto de suicidios y también de alcoholismo. Es gente que necesita ayuda, que les enseñen y que se abran los medios para que puedan vivir mejor. Hay que tomar en cuenta que a través de Internet y de otros medios les llega información de cómo funciona el mundo, mientras ellos siguen ahí. Es una mezcla de impotencia, desesperación y a veces por falta de fe, no encontrarle sentido a la vida”.
El Padre Fabio ya está partiendo hacia Florida, Estados Unidos, donde tiene nuevo destino en una parroquia de esa ciudad, para continuar con su tarea pastoral.