Los octavos de final de la Champions League comenzaron con el duelo que protagonizaron el PSG y el Chelsea en el Parque de los Príncipes. Con la presencia de Ezequiel Lavezzi en la ofensiva parisina, los dueños de casa tuvieron que afrontar su compromiso ante uno de los posibles candidatos al título.
La paridad de los equipos hizo que en los primeros diez minutos no se generen ocasiones de riesgo, hasta que dos cabezazos hicieron lucir a Thibaut Courtois. El arquero se deshizo de los intentos de Blaise Matuidi y Zlatan Ibrahimovic con dos tapadas soberbias.
La férrea defensa compuesta por Davis Luiz, Thiago Silva, Maxwell y Gregory van der Wiel atentó contra la triangulación que buscó gestar el conjunto inglés en los pies de Fábregas, Eden Hazard y Willian. Por lo tanto, la visita debió apostar por un juego hostil basado en la pelota parada.
Como si se tratara de una imitación auténtica, los de Laurent Blanc volvieron a aproximarse al gol a través de un tiro de esquina. Un centro del "Pocho" encontró la cabeza de Edinson Cavani y el belga voló para descolgar un balón que tenía destino de ángulo. En la respuesta británica, una combinación entre tres defensores que habían incursionado en territorio ajeno le permitió a la visita sorprender con el 1 a 0. El envío de John Terry, el taco de Gary Cahill y el oportunismo de Branislav Ivanovic despertaron la desilusión francesa, dado que el golpe recibido acercaba al PSG a una prematura salida de la competición más codiciada del Viejo Continente.
La ilusión francesa resurgió en el complemento gracias a Cavani. El uruguayo capitalizó una pelota en el área chica y sentenció el 1 a 1. Con la conquista los locales recuperaron la confianza y a través de las intervenciones de Ibrahimovic y Lavezzi merecieron revertir el marcador. La individualidad del sueco, para dejar a tres hombres en el camino y definir con un disparo rasante fue una clara situación que bien pudo concluir en la red, pero Courtois volvió a aparecer para salvar al Chelsea. Además, en el rebote tomado por el argentino, los dueños de casa no lograron festejar por la notable reacción de César Azpilicueta, quien despejó el peligro sobre la línea de meta.
En el desenlace del espectáculo el atacante oriental volvió generar una chance para conseguir la victoria. Tras una excelente pared construida con Matuidi, el ex Nápoli quedó mano a mano frente a la gran figura de la noche y buscó el palo más lejano del guardameta, pero su definición se fue apenas ancha.
Si bien la llave permanece abierta, el empate ubica a la entidad de Londres como favorita a quedarse con el boleto a los cuartos de final, ya que la revancha se disputará en Inglaterra. Una situación similar a la que ocurrió en Ucrania, en donde el Bayern Múnich igualó sin goles frente al Shakhtar Donetsk y espera el desquita en el Allianz Aren.
Fuente: Infobae.