A los 78 años, Juan Carlos Harriott (h.) fue reconocido con el ingreso en el “Hall de la Fama de Wellington” Palm Beach, en una ceremonia de gala que ha tenido lugar en una carpa contigua al Museo del Polo de esa ciudad, donde está desarrollándose el circuito de alto handicap de Estados Unidos.
"Lo considero como un honor. Estoy contento y muy agradecido", contó el suarense desde Wellington, uno de los dos mejores polistas de la historia. Pese a los incontables éxitos de una trayectoria que cerró en 1983, sólo en 2015 Harriott recibió la distinción.
Nadie del comité de selección lo propuso hasta el año pasado, cuando lo hizo el argentino Horacio Laffaye, que vive allá y es historiador de polo.
Normalmente, un candidato postulado espera varios años para acceder al “Hall de la Fama” pero en el caso de “Juancarlitos” la votación fue casi unánime, con sólo una disidencia.
El ex crack de Coronel Suárez jugó apenas unas siete veces en Estados Unidos, cuando en este deporte recién despuntaba el profesionalismo.
"Lo peor del asunto fue hablar. Antes me arreglaba mejor con el inglés; ahora estoy fuera de entrenamiento. Manifesté que decir «muchas gracias» era quedarme corto", contó quien fue ovacionado tras su breve discurso en la cena que compartió con sus dos hijas y sus cinco nietos, y en la que se emocionó por el tributo.
Ahora comparte el Hall de la Fama con compatriotas ilustres: Gonzalo Pieres, el recordado Gonzalo Tanoira y el nacionalizado argentino Lewis Lacey.
Difícil, casi incompresible para cualquier amante del polo, pero real. Después su creación hace 26 años el Museo del Polo con sede en Palm Beach, justamente donde los argentinos son los grandes protagonistas de su temporada más importante, pagó una cuenta con la historia, y en su gala anual donde se agasaja a los nuevos integrantes del Hall of Fame, se sumó a Juan Carlos Harriott (h.).
Y en este sentido la repercusión mundial ha sido importante, por ejemplo ESPN señaló “En este caso, no hicieron falta varios meses de estudio y su postulación fue aceptada inmediatamente. Según los organizadores, "Juancaritos", hoy con 78 años, apenas jugó unas 7 temporadas en un por entonces "polo muy amateur" en los Estados Unidos, y desde su creación el Museo del Polo se enfocó en sus figuras locales”.
Del mismo modo, para los americanos, a la hora de sumar al astro de Suárez, pesaron más las 4 Copas de las Américas, donde la Argentina venció a USA, en una punta u otra del continente; que los 20 Abiertos Argentinos, los 12 de Hurlingham o los 14 de Los Indios-Tortutugas.
Pese a los incontables éxitos de una trayectoria que cerró en 1983, sólo en este año 2015 Harriott acaba de recibir la distinción.
Con la distancia del tiempo, siempre es complicado ponerse en situación de los logros; por eso, como hoy Cambiaso reconoce a Gonzalo Pieres, que mejor que el jugador de La Espadaña y creador de Ellerstina, para hablar de su mentor: "Nunca va a haber un Juan Carlos Harriott en el sentido de alguien que gane tantos Abiertos. Es un problema más de competencia. Desde mediados de los años '80, para ganar Palermo se compite con 4 ó 5 equipos que están mucho más parejos. En la época de ellos, hubo dos equipos que duraron 20 años".
Estados Unidos, puso sus cuentas en orden con la historia; llegó el turno de la Argentina. |