Si nos remitimos a la historia y como llego la electrificación a las zonas rurales de nuestro país, podemos decir que este espacio encontró en principio un frontón en las empresas privadas y el estado que se negaban sistemáticamente a cubrir este servicio que no era rentable. Si se establecía una tarifa calculando los costos que tiene este servicio comparado con el urbano comercial o industrial nos daríamos cuenta que sería mucho mayor ya que las líneas rurales requieren más costo de personal, vehículos y materiales por razones de distancias ,mas exposición climática y obviamente menor densidad poblacional.
Históricamente hubo un periodo donde las tarifas la fijaba el HCD de los municipios que tenían cooperativas en su jurisdicción, esto permitía fijar una tarifa t4 rural acorde al gasto originado por dicho servicio lo que permitió prestarlo con normalidad con la llegada de la regulación del mercado eléctrico, calidad de servicio etc. Las tarifas las estableció la provincia estableciendo una tarifa rural prácticamente igual a la residencial (no es lo mismo una manzana con 50 usuarios que cada 100 hectáreas con 1 usuario).
Ningún organismo oficial, ni privado han hasta ahora establecido reglamentación alguna, ni pautas clara sobre este servicio, que pone en riesgo el normal funcionamiento de las Cooperativas Eléctricas del país.
Es necesario que todos los actores que tienen responsabilidad sobre este servicio indispensable para el sector rural y que nadie aun se atreve a establecer una reglamentación y pautas claras a efectos de evitar que se torne imposible para las cooperativas prestar este importante servicio.-
Rodolfo Daniel Gonzalez
Concejal Frente para la Victoria
HCD Coronel Suárez