Es uno de los integrantes de la Comisión que está trabajando fuertemente desde el año 2012 por las obras de mantenimiento en la Iglesia de Pueblo Santa Trinidad.
Es que en el año 2017 estará cumpliendo 100 años de la inauguración de esta bella Iglesia construida por los vecinos de entonces con mucho esfuerzo, dedicación y, sobre todo, contracción religiosa.
“Empezamos hace casi 3 años atrás, trabajando firme, con la convicción de querer remodelar el templo que no ha tenido el mantenimiento correspondiente en estos 100 años. Una Comisión se formó muy entusiasta, con ganas de trabajar y teniendo algunos recursos no oficiales, sino generados por nosotros, y que hemos llegado a esta instancia”, dijo Rubén.
Consideró Rubén Hall que “anterior a esto habíamos puesto los techos de la Sacristía y del Altar Mayor y así mismo lo que es el cielorraso del Altar Mayor. Era una ambición muy desmesurada, porque pensábamos que era una cosa casi inalcanzable. Tuvimos la gran suerte de poder concretar la compra de las chapas y tenemos gente que nos está haciendo el trabajo ad honorem. Es gente de la comunidad, que se siente identificada con la Iglesia, con el pueblo y con nosotros, que estamos aparentemente haciendo las cosas bien. Por eso la gente colabora de diferente manera para hacer realidad todo esto que nos hemos propuesto”.
Cuenta Rubén Hall que contaron desde un principio con todo el apoyo y la confianza del Padre Mario, Sacerdote que apenas hace unos días atrás ha sido llevado a la Residencia para Sacerdotes jubilados que tiene la Congregación Misioneros del Verbo Divino.
Y mientras esperan poder contar con un nuevo Sacerdote que se encargue de la atención espiritual de todos los fieles, la Comisión, que está integrada por un grupo muy laborioso, honesto y responsable de personas de Santa Trinidad, sigue trabajando en todas las obras de mantenimiento y remodelación del templo que en el año 2017 estará cumpliendo 100 años desde su inauguración.