El Dr. Carlos Pellegrini es Médico especialista en Pediatría y Asesor Técnico Médico en el CEF Nº 70. Es además un profesional que ha trabajado mucho en el tema de las adicciones.
Consultado sobre la realidad de Coronel Suárez afirma que “hay muchos más adictos, muchas más personas que consumen. La verdad que la situación es preocupante, por la cantidad de jóvenes que consumen, por la sustancia que consumen y también es preocupante porque uno ve una inacción por parte de la sociedad, la familia y el Estado. A veces uno escucha reclamos de otro tipo y pone a sopesar la importancia de esas otras inquietudes de la sociedad y encuentra que este tema no está dentro de las inquietudes principales. Eso hace que la ocupación por parte de los actores no sea del todo eficiente, porque no hay una demanda de la sociedad. Mientras tanto los chicos siguen consumiendo, sigue habiendo cada vez más adictos y con sustancias bastantes complejas”.
Requerido en torno a cuál debería ser el rol de la sociedad, el Estado y los padres en torno a este tema, responde el Dr. Pellegrini que “siempre explico que hay que diferenciar dos cosas; primero la oferta y la demanda. La eterna discusión es si la oferta está porque hay demanda y si la demanda de los jóvenes es tal porque existe la oferta. Es toda una discusión que en algún momento debería quedar a nivel de la sociedad. En cuanto a la oferta tiene que intervenir el Estado, que es el que tiene que controlar cómo ingresan las sustancias ilícitas en la ciudad. Hay mucho consumo de cocaína, muchísimo de marihuana y otras sustancias ilegales. La función del Estado es controlar la oferta”.
En cuanto a la demanda, el profesional apuntó que “ahí tienen que intervenir las familias y la sociedad, fundamentalmente, en la prevención. Yo lo que veo es que la familia no le da importancia en algunos casos y no saben cómo manejar la mayoría de los casos, las familias no saben qué hacer con los jóvenes y esto uno lo percibe cuando habla con ellos. Entiendo que tampoco es fácil cuando ya empezó a consumir porque el chico empieza a revelarse, a tener actitudes agresivas, a alejarse del núcleo familiar y seguramente se acerca al núcleo de consumo, que es el ámbito en el que él se siente más cómodo. Ahí yo creo que hay una gran falla de la sociedad. Llamo sociedad a todos: a los efectores de salud, al Estado, al sistema educativo; a todos los actores que podrían intervenir en la prevención. Hay esfuerzos aislados, es cierto, pero por aislados no arrojan todos sus frutos, pierden fuerza y potencia”.
Destacó en cuanto al tratamiento el trabajo del CPA, que se encarga del tratamiento de los adictos, y reclamó por la falta de un organismo que se encargue de la prevención y de coordinar las acciones que ahora son de instituciones que trabajan aisladamente, con el objetivo que se sostengan en el tiempo, sean continuadas.
Más adelante, en el reportaje, destacó enfáticamente que “no es cierto que el consumo de alcohol y drogas como la marihuana no provoquen problemas. Sucede que, por ejemplo, en el caso de la marihuana no se pueden hacer estudios –como se hizo para el cigarrillo, por ejemplo- porque se trata de una sustancia que es ilegal. Pero provoca la muerte de neuronas y otros efectos en el organismo que consume estas sustancias”.