Los Profesores Felipe Guzmán y Ana Téllez integran la Dirección de Educación Superior de la Provincia de Buenos Aires y son referentes para este organismo de Educación, Derechos Humanos y Memoria.
El viernes por la mañana estuvieron en Coronel Suárez invitados por el Instituto de Formación Docente Nº 48 brindando el taller “Entre la memoria y la promesa: taller sobre Pedagogía de la Memoria en la obra de Jorge Huergo”.
Consultados por La Nueva Radio Suárez explicaron que Jorge Huergo fue Director de Educación Superior, impulsor de muchos de los cambios institucionales en los procesos de democratización y ampliación de derechos, propios del nivel. Falleció sorpresivamente a principio de este año.
“Nosotros, en honor a la obra que él realizó, tratamos de llevar a la mayor cantidad de institutos posibles un ciclo de charlas, homenajes y talleres recuperando la obra pedagógica de Jorge Huergo”.
En torno a los aportes e innovaciones del Profesor Jorge Huergo, indicaron que “fundamentalmente se refieren a la concepción del estudiante y la participación que se le asigna. Se avanza en el proceso de apropiación de sentidos para todo lo que sea actividad pedagógica. El estudiante pasa de ser un sujeto receptor, pasivo; logrando dar un paso gigantesco en el sentido de la apropiación de los espacios, como por caso la formación de Consejos Académicos Institucionales, que deben ser conformados por estudiantes, docentes, no docentes del nivel para empezar a rediscutir y redefinir las políticas educativas institucionales. Más adelante se da también un proceso de la toma de decisiones, dándole un carácter resolutivo al Consejo Académico”.
A la pregunta si a la memoria hay que enseñarla, hay que educarla, ambos profesores respondieron que “la discusión sobre si se enseña o no se enseña la memoria es bastante amplia. Nosotros desde la Dirección de Educación Superior sostenemos que la memoria es un proceso y un hecho colectivo. No es algo que nosotros pretendamos enseñar desde el nivel, sino que pensamos en construir. La memoria no es algo enlatado que se transmite y se explica. Tampoco desde el ámbito de los derechos humanos la memoria es algo de lo que el Estado se tenga que apropiar, es algo colectivo, donde la sociedad en su conjunto elabora preguntas y respuestas para conformar la memoria histórica”.
Mas adelante comentan que “muchas veces se asocia la política a lo partidario, cuando la memoria es algo colectivo. Política hacemos todos todo el tiempo. Educación Superior, a partir de la nueva Ley de Educación, lo que deja muy claro es que la educación es fundamentalmente política, lo explicita en los textos”.
Finalmente, y tomando cuestiones del 2003 hasta acá, en términos de derechos humanos, ha habido una ampliación increíble.
“Para dar un ejemplo, tenemos desde entonces los primeros genocidas presos en cárceles comunes y de hecho uno termina falleciendo en una cárcel común. Esto no es venganza, esto es justicia, que durante mucho tiempo la sociedad civil reclamó. Los primeros en reclamar por verdad y justicia, por poner en valor los derechos humanos, eran organizaciones sociales. Nosotros, desde el nivel, creemos firmemente que hoy en los institutos están las organizaciones sociales y es necesario una construcción democrática de este nivel educativo”.